Tuesday, 23 de April de 2024
Lunes, 13 Julio 2015 04:07

Las entrañas de Chalchihuapan: la pareja Del Castillo-Bautista vendió y traicionó al movimiento

El abogado y la madre del ex edil de Chalchihuapan, Javier Montes, han lucrado con las víctimas del 9 de julio, exigen jugosas compensaciones a cambio de la defensa de los detenidos, y presionaron a Elia Tamayo para pedir al gobierno del estado una indemnización de 15 millones de pesos por la muerte de su hijo

Por : Edmundo Velázquez / @mundovelazquez

El abogado Alejandro del Castillo y Araceli Bautista, madre del ex edil de Chalchihuapan, Javier Montes, son los responsables de desactivar y llevar al fracaso el movimiento generado tras el cruento desalojo del pasado 9 de julio, en el que resultó herido de muerte el niño José Luis Tlehuatle.

La pareja Del Castillo-Bautista —según declararon a CENTRAL los pobladores— se han encargado de lucrar con el movimiento: filtraron al gobierno la ubicación de quienes organizaron la manifestación del 9 de julio para que fueran detenidos, ofrecen asesoría jurídica a las víctimas a cambio de jugosas compensaciones,  y presionaron a Elia Tamayo para que pidiera al gobierno morenovallista 15 millones de pesos como indemnización por la muerte de su hijo.

La intervención del dúo provocó que a lo largo de 2015 se desactivara el movimiento y se confrontaran públicamente con la principal operadora y publirrelacionista de la comunidad, Roxana Luna, su hermano Vladimir Luna, y el activista Misrraim Hernández; con la finalidad de que el pueblo perdiera la conexión con el Congreso de la Unión y la Comisión Nacional de Derechos Humanos para mantener vivo el caso.

El movimiento comenzó a descomponerse a partir de que el abogado, Alejandro del Castillo, inició una relación sentimental con Araceli Bautista, según comentan en el pueblo. Además, el periodista  Fermín Gracia, de La Jornada de Oriente, ha señalado que Del Castillo se mudó a habitar la casa de Araceli Bautista en la comunidad.

Así, Del Castillo-Bautista provocaron que la marcha del pasado 9 de julio para conmemorar un año del Caso Chalchihuapan fuera un rotundo fracaso con solo 60 participantes. La pareja se apoderó del movimiento al grado de que son los únicos que mantienen comunicación con la madre del niño José Luis Tlehuatle y deciden las entrevistas, ruedas de prensa y eventos en los que participa.

El propio ex edil de Chalchihuapan, Javier Montes, a través de una carta escrita desde la cárcel, se deslindó de Alejandro del Castillo, lo responsabilizó por la ruptura del movimiento y hasta lo señaló como el responsable de que hoy se encuentre en la cárcel. 

Los pobladores, víctimas del desalojo del 9 de julio, platicaron a CENTRAL que la pareja  Del Castillo-Bautista intentaron arrebatarles a las esposas de los 5 detenidos por el caso, la ayuda de 10 mil pesos que a cada una le entregó la secretaria general del PRI, Ivonne Ortega, supuestamente para “pagar a los abogados” que llevaban la defensa de sus maridos, sin embargo gracias a la intervención del Movimiento Alternativa Social, el dinero les fue devuelto.

La intromisión de la dupla llegó al grado de que presionaron a Elia Tamayo para  rechazar la oferta de indemnización de 5 millones de pesos ofrecida por el gobierno estatal y pusieron en la mesa de negociación 15 millones, sin embargo la señora Elia  públicamente sólo ha pedido que el secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas, sea encarcelado como el responsable del asesinato de su hijo.

La dupla de Alejandro del Castillo y Araceli Bautista tienen ahora control absoluto sobre la madre de José Luis Tlehualte, Elia Tamayo. Según publico el periódico Cambio, ellos se encargaron de presionarla para exigir al gobierno de Rafael Moreno Valle una indemnización por 15 millones de pesos.

Sin embargo, públicamente Elia ha declarado que no está interesada en el dinero y que lo único que quiere es que el secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas sea encarcelado por su responsabilidad en la muerte de su hijo.

Elia es presionada por Araceli Bautista, el abogado Alejandro del Castillo y por las panistas que se sumaron recientemente al movimiento, Ana Teresa Aranda y Violeta Lagunes, para que negocio hasta 15 millones de pesos”, señala el periódico local.

Estas versiones se suman a comentarios de vecinos de San Bernardino Chalchihuapan quienes acusan a Araceli Bautista como una mujer protagónica que quiso “quedarse con el movimiento y hasta con la presidencia auxiliar” una vez que fue apresado su hijo.

Araceli Bautista despachaba en la presidencia auxiliar hasta que fue nombrado el suplente de Javier Montes, pero ella se sentía presidenta de Chalchihuapan. La gente no la dejó porque ella no tenía ningún derecho. Ya nadie la quiere en el pueblo, ni cuenta con el apoyo de nadie”, revelaron pobladores a los que tuvo acceso CENTRAL.

Además, la dupla  intentó arrebatarles a las esposas de los 5 detenidos por el caso, la ayuda de 10 mil pesos que a cada una le entregó la secretaría general del PRI, Ivonne Ortega, supuestamente para “pagar a los abogados” que llevaban la defensa de sus maridos, sin embargo gracias a la intervención del Movimiento Alternativa Social, el dinero les fue devuelto.

Fue el 18 de octubre de 2014 cuando los pobladores de Chalchihuapan comenzaron a desconfiar de Araceli Bautista y el abogado Alejandro del Castillo, pues esa madrugada policías ministeriales tomaron por asalto la comunidad y detuvieron a 5 pobladores, de los cuales hoy 3 ya están libres. En ese momento, los habitantes cuestionaron por qué casualmente ese día Javier Montes no se encontraba en la comunidad para también ser detenido.

Semanas después, las esposas de los 5 detenidos se reunieron con la secretaría general del PRI, Ivonne Ortega, quien les entregó 10 mil pesos a cada una como ayuda para sustentar a su familia mientras los esposos se encontraban presos. De inmediato la dupla Del Castillo- Bautista intentó arrebatarles el dinero con el pretexto de cubrir el pago a sus abogados, sin embargo las señoras lograron recuperar el apoyo y de inmediato cortaron relaciones con el abogado y la madre del ex edil.

A la par, el dúo comenzó a filtrar en el pueblo la versión de que las traiciones provenían de la diputada del PRD, Roxana Luna, y así comenzaron a correr los rumores de quiénes realmente estaban lucrando con Chalchihuapan.

Pero para completar la desactivación de la legisladora del PRD, y principal promotora del movimiento a nivel nacional, enviaron una carta al Senado para deslindarse de Roxana Luna y desde ese momento la legisladora dejó de ser públicamente la vocera de los pobladores, por decisión propia y para evitar más rencillas en la comunidad.

En el caso de Misrraim Hernández, integrante del Contingente Puebla, la dupla corrió el rumor de que el activista había cobrado un porcentaje de la indemnización de Hugo Jiménez Varela, quien fue lesionado en el ojo derecho durante el desalojo. Araceli Bautista logró así que a Hernández Hernández le negaran la entrada al pueblo.

En febrero de 2015, Alejandro del Castillo puso en marcha un plan para desactivar la Coordinación Estatal por la Defensa de la Identidad de los Pueblos (Cedip), creada por los ediles auxiliares inconformes con la medida del gobierno para quitarles el control de los registros civiles en sus comunidades.

Del Castillo, ayudado por Araceli Bautista, registró una organización con siglas similares ante la Dirección General de Normatividad Mercantil de la Secretaría de Economía federal. Según explicó José Salomé Pacio en esta Coordinadora de Defensa de la Identidad de los Pueblos  no se encuentra algún edil auxiliar y solo fue creada para “confundir a la opinión pública”.

Finalmente, sobre la manifestación del pasado 9 de julio, a la que solo asistieron 60 personas, los pobladores  aseguraron a CENTRAL que ni siquiera fueron convocados para participar.

No convocaron a nadie. Y si hubieran convocado no habrían ido. No le tienen confianza ya. Saben bien que van a vender a Elia Tamayo, que están comerciando con ella y con su dolor. Eso lo ven mal en el pueblo”, comentó uno de los pobladores.

De acuerdo con los pobladores de la junta auxiliar, el abogado Alejandro del Castillo sostiene una relación sentimental con Araceli Bautista, madre del ex edil, Javier Montes.

En reiteradas ocasiones, el periodista de La Jornada, Fermín García, aseveró que el abogado se mudó incluso a vivir a Chalchihuapan y los pobladores refieren que en casa de Bautista.

El propio Javier Montes ha declarado que su madre, influenciada por Del Castillo, lo ha abandonado en la cárcel, pues no lo visita en el penal ni responde sus llamadas.

Según señala el ex edil de San Bernardino Chalchihuapan, Jairo Javier Montes Bautista, su madre, Araceli Bautista, se ha negado a hablar con él desde que ingresó al penal de San Miguel. Insiste en que se ha olvidado del movimiento y Del Castillo, que se presume como su defensor, no está ya encargado de ningún asunto jurídico respecto a su defensa.

En entrevista concedida a CENTRAL la semana pasada, Javier Montes señaló a Alejandro del Castillo por dividir el movimiento e incluso planteó que es probable que él haya sido uno de los involucrados en su detención.

El ex edil también envió una carta en la que se deslindaba del abogado Del Castillo, además exigía que agentes externos al movimiento de las Juntas Auxiliares dejaran de lucrar con el dolor de Elia Tamayo, la madre del niño José Luis Tlehuatle.

La entrada de Alejandro del Castillo al movimiento de Chalchihuapan fue sutil, según señala la diputada federal perredista Roxana Luna, llegó y planteó apoyarlos: “llegó un día y dijo que quería apoyar en la defensa. No lo vimos mal y confiamos en él”, comentó en entrevista la perredista e integrante del Movimiento “Los de Abajo”.

“Los de Abajo” fue la organización que apoyó a Jairo Javier Montes Bautista para llegar a la presidencia auxiliar de San Bernardino Chalchihuapan y vencer al movimiento Antorcha Campesina que mantiene hasta la fecha el control de la cabecera municipal, Santa Clara Ocoyucan, zona que se ha vuelto estratégica porque, el desarrollo residencial Lomas de Angelópolis se ha extendido hasta esa zona colindante con Puebla y San Andrés Cholula.

Siempre iba al momento en que entraban los operativos. Fue a vender que él sabía cuándo entraban los policías. Yo tuve que integrarme al Congreso y ante la ausencia todos los días iba a Chalchihuapan, hasta que convenció a Araceli Bautista que nosotros no estábamos haciendo nada”.