A Elia Tamayo Montes los vecinos de San Bernardino Chalchihuapan la dejaron sola. En la marcha que conmemoró el primer aniversario del cruento desalojo del 9 de julio del 2014 la única víctima que se manifestó fue la madre del niño José Luis Tlehuatle acompañada de sus hijas, el resto de los miembros del contingente de 60 personas fueron comerciantes de la 28 de Octubre, integrantes del Movimiento Alternativa Social, y de Puebla Libre las panistas Ana Teresa Aranda y Violeta Lagunes.
Jamás aparecieron las esposas de los dos inculpados que aún están en prisión, ni los mutilados en el encontronazo con los policías estatales. Lució más el protagonismo de la panista Ana Teresa Aranda y la organización Puebla Libre, el Movimiento Alternativa Social o incluso la Asociación de Colonos de Agua Santa.
Al reclamo de Elia Tamayo le robaron protagonismo Araceli Bautista, la madre del ex edil de Chalchihuapan Jairo Javier Montes, y su abogado, Alejandro del Castillo. La madre del niño José Luis encabezó una caravana de no más de cien personas que salió del lugar donde fue herido su hijo.
El sitio fue llamado “El Puente de la Victoria” por ser el escenario donde los pobladores vencieron a los Estatales. “Perdonen las palabras pero aquí les pusimos en su madre a los policías estatales”, dijo Araceli Bautista. Una manta con el nombre de la población mal escrito rotulaba el puente con la nueva denominación.
A las 11 la marcha tomó parcialmente la autopista por unos kilómetros. Después los manifestantes ocuparon camiones. Ocho habían sido preparados pero solamente tres fueron ocupados por la poca convocatoria que tuvo el movimiento. No hubo más manifestantes. El miedo entre los vecinos pudo más.
Realmente no hay más rondines. Pero la gente está temerosa. Hay ciertos rumores. Tememos que vuelvan a entrar al pueblo”, comentó el nuevo edil de Chalchihuapan”, Juan de Dios Montes García, entrevistado previo a la salida de la marcha del puente de la población.
¿Y las juntas auxiliares?
Este 9 de julio fue distinto. Solamente Rocío Pérez Pérez, hija del ex edil de Canoa, Raúl Pérez Velázquez recuerda porqué inició el movimiento. Recalcó que su padre, el ex alcalde de Chalchihuapan Javier Montes Bautista y el presidente de La Resurrección, Leonardo Sabino Báez, luchaban por regresar a los pueblos indígenas sus registros civiles. “Soy indígena. Orgullosamente”, grita Rocío quien se encuentra con los manifestantes en el asta bandera del Centro Integral de Servicios.
Rocío Pérez Pérez recordó que la muerte de Tlehuatle y el encarcelamiento de los ediles, inició con los cambios a la Ley Orgánica Municipal ordenados por el gobierno Morenovallista y acatados por el Congreso local.
Al gobernador le vale un comino. Todo para decir que estas mega obras son el cambio. ¿Cuál cambio? ¿El encarcelamiento? ¿La muerte? ¿O acuál cambio se refiere el gobernador? Pedimos justicia para José Luis, para Elia Tamayo, para Chalchihuapan, para cada uno de los presos políticos”, dijo Rocío con lágrimas en los ojos.
Pocos recuerdan la lucha de la CEDIP, pocos, como advirtió desde prisión Javier Montes Bautista días atrás, recuerdan la lucha por los registros civiles y los pueblos indígenas, lo que originó las movilizaciones y los que los llevó a este día.
Nuevamente en la segunda estación de la marcha pidieron la palabra otros activistas, Alan Zepeda del Movimiento Latinoamericano y del Caribe de Niños y Niñas Trabajadores (Molacnats) retomó el orden de la movilización.
Que hable Chalchihuapan
El último punto de la movilización fue el Parque de la Niñez. Hoy, como el puente, también cambiará de nombre. Según la agenda de la marcha en el sitio se colocará una placa con la que se renombre el lugar como "Parque José Luis Alberto Tlehuatle".
Sin embargo, los primeros manifestantes advirtieron que en el lugar está el ex secretario municipal de Gobernación, Manuel Castañeda que hoy funge como oreja del Gobierno del estado. Él y otros funcionarios, policías y demás se adelantaron al Parque de la Niñez. En la zona se colocó una agencia del ministerio público móvil.
Es obvio que estaban ahí para amedrentar. El cambio de juego desde Puebla Libre se dejó escuchar en voz de Ana Tere que nuevamente tomó la palabra y adelantó que no se colocará la placa por temor a que se inicien nuevos procedimientos penales por daño en propiedad ajena. Pero cuando Ana Tere va a tomar el habla una señora se pone elocuente:
Que hablen los de Chalchihuapan, que ellos pasen al frente. Esto no es de políticos. Esto es por la gente de Chalchihuapan. Que hable Elia”, dice una mujer cuando Ana Teresa Aranda y Violeta Lagunes, que también llegó apenas una hora antes a la manifestación. "Todos somos ciudadanos, señora, todos somos ciudadanos", dice Lagunes en defensa mientras se forma junto a las hijas de Elia Tamayo.
"Eso no es cierto. Ustedes son del PAN", dice la señora mientras comienzan a repartir globos blancos. Los organizadores cambian el tema y piden que hable Elia. "Todos somos hijos de Elia", dicen en la manifestación.
Elia inició sola la marcha, con sus cuatro hijas y su hermana Narcisa; pero sin Chalchihuapan, siin los heridos, sin los presos recién liberados, sin las esposas de los dos paisanos aún encerrados. Eso sí, todos, ese día fueron hijos de Elia.
Fotos: EsImagen