Dania Nájera / @Dania_conD
“Permite que te invite a la despedida. Permite que te dedique la última línea”. El cantante español Enrique Bunbury dejará los escenarios, ya no dará más conciertos.
A través de sus redes sociales, Enrique Bunbury comunicó su retiro de los escenarios con un mensaje nostálgico:
Llevo años arrastrando un malestar que me ha costado mucho localizar y comprender, desde la gira de Mutaciones en el 15-16”, escribió.
El pasado sábado 26 de febrero cerró su gira en México. El Tour 2022 +35 años dio inicio el 29 de enero en Acapulco, Guerrero, donde vimos a un Bunbury queriéndose comer al mundo con esa emoción y entusiasmo después de casi cuatro años de no dar conciertos.
Hizo felices a miles de guerrerenses que corearon sus canciones “De todo el mundo”, “El club de los imposibles” y “Maldito duende” con la que bajaba a saludar a su público.
Siguió la gira por Puebla, donde lo recibieron con un recinto lleno de gente eufórica que entonó “El rescate”. Continuó por Oaxaca, el único estado donde cantó “El viento a favor”.
Tuvo que posponer algunas fechas por cuestión de logística y protocolos de covid en algunos estados. El 11 de febrero todo pintaba bien para el aragonés con un Palacio de los Deportes en la Ciudad de México pletórico, pero antes del concierto, el médico le había dado la noticia de que debía reposar por lo menos una semana para poder seguir con las fechas programadas.
La tristeza se percibía en su mirada; su voz un poco ronca
Esa noche hizo rugir al “Domo de cobre” con un majestuoso espectáculo, a pesar de la tristeza que se percibía en su mirada y su voz un poco ronca.
Al día siguiente, anunció que el concierto del 12 quedaba pospuesto y cancelaba Toluca y Monterrey, debido a temas de salud; fue en Los Ángeles donde se recuperó en casa.
El 20 de febrero regresó a tierras aztecas para concluir la gira en la Ciudad de México, luego dos fechas en Guadalajara y la última en Querétaro.
El 27 de febrero se despidió de México para continuar su gira por Estados Unidos. El mismo día dio a conocer que estos eran sus últimos conciertos:
Mi garganta se cierra e irrita, y mis vías respiratorias dificultan el más leve ejercicio y la ejecución de mi trabajo. De manera que lo que normalmente era un placer y deleite se ha convertido en un fuerte e inmenso dolor y sufrimiento. Nada de esto me ocurre jamás si no estoy de gira”.
Agradeciendo a su público, sus músicos, su equipo técnico, su management, a todos los que lo acompañaron en estos 35 años de carrera y con el apoyo de su familia, ha decidido dedicarse a componer canciones, grabar discos, pintar y escribir libros de poesía.
Esperemos que el viento sople a favor y tengamos Bunbury por más tiempo, por siempre.
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