Los turistas que llegaron a visitar en estos días los históricos Lavaderos de Almoloya causaron destrozos en este lugar histórico, por lo que el INAH ordenó su cierre. Se abrieron al público en mayo pasado tras estar privatizados por distintos hoteles durante siete años.
Sin precisar quiénes, los turistas causaron destrozos en los Lavaderos de Almoloya: una laja rota y un lavadero despostillado fue el resultado del ingreso de las personas en menos de un mes, desde el anuncio del rescate realizado por parte del Gobierno de Puebla.
Los propios trabajadores del lugar informaron a CENTRAL que el paso a los lavaderos se volvió a cerrar con rejas por instrucciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Historia de los Lavaderos de Almoloya
El objetivo es dar mantenimiento al lugar para reparar los daños, pues los lavaderos datan del siglo XVIII. Estos fueron utilizados hasta el siglo XX por los habitantes del Barrio de San Francisco.
Eran mujeres quienes acudían a los Lavaderos de Almoloya para lavar ropa de personas ricas y pobres, ajena o de su familia. Pasaban hasta seis horas arrodilladas en el lugar tallando a mano.
En la zona se mantiene un nacimiento de agua y un túnel que ayuda a desfogar la corriente en temporada de lluvias para evitar su inundación.
Desde el siglo XVI, en el sitio donde se ubican los lavaderos, ya había agua potable que se nutría con los mantos freáticos del Río de San Francisco.
Fue el 20 de mayo cuando la administración estatal de Miguel Barbosa Huerta anunció la apertura al público de los Lavaderos de Almoloya como un sitio turístico para el disfrute de los habitantes y turistas de manera gratuita.
Barbosa señaló que la zona se mantuvo privatizada por particulares en un comodato entregado por las administraciones pasadas. Primero en manos del Hotel Azul Talavera, ahora Banyan Tree, que estipularon el acceso como exclusivo, es decir, sólo para sus huéspedes.
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