Autoridades confirmaron que Amedleni Uriel, uno de los involucrados en el secuestro y asesinato de Aldo Islas, el alumno de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), se dio a la fuga. Esto debido a que continuaba su proceso en libertad y no acudió a la audiencia.
Aunque tres de los responsables del delito ya están sentenciados a 80 años de prisión y se les fincó una multa de más de 1 millón 200 mil pesos, Amedleni Uriel se encuentra prófugo. Esto debido a que se le modificaron las medidas cautelares y logró obtener prisión domiciliaria. Cabe resaltar que esta situación la utilizó para escapar.
El titular de la Fiscalía General del Estado, Gilberto Higuera Bernal, explicó que el caso de Aldo Islas Todd se mantiene en proceso penal por lo que ellos ya no tienen competencia. A pesar de ello, se comprometió a colaborar en investigar y proceder legalmente en los términos que a ellos les responda.
Cabe mencionar que Amedleni Uriel logró obtener un amparo para continuar su proceso en libertad; sin embargo, no asistió a la audiencia el pasado 27 de junio del año 2018. En ese momento, se emitió una orden de aprehensión en su contra.
Se sabe que Amedleni Uriel engañó a Aldo Islas para llevarlo al lugar donde él y sus cómplices cometieron el secuestro y asesinato, luego de lograr libertad provisional, se dio a la fuga.
¿Cómo fue el rapto de Aldo Islas?
El rapto y asesinato de Aldo Islas sucedió el 17 de mayo del año 2018 cuando sus compañeros de la facultad de Contaduría de la BUAP lo engañaron para secuestrarlo y pedir dinero a cambio de su libertad.
Uriel N., supuesto amigo de la víctima citó al joven en Plaza Dorada en la capital poblana, supuestamente saldrían de fiesta con otros cuatro amigos.
Los cinco compañeros incluido Aldo Islas, fueron al Hotel 5 Villas, pero no entraron y luego se trasladaron al Motel Miño.
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Según reportes de la Fiscalía Especializada en Delitos de Alto Impacto, el estudiante pudo darse cuenta del acto de sus compañeros tramaron en su contra y los enfrentó.
En dicho enfrentamiento, los cuatro jóvenes decidieron matarlo. Luego de su muerte, los secuestradores realizaron 12 llamadas a sus familiares en las que pedían 750 mil pesos por el rescate del estudiante.
Los secuestradores están identificados como: Uriel N. de 19 años, Guadalupe N. de 18 años; Nayeli N. de 15 años; Jorge Luis N. de 19 años e Iván Cándido N. de 35 años.
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