¡A la madre! Con todo el respeto que a Sergio Salomón y a su familia, pero yo sí le daba tremendas cromadas.
Le llevaba las pantuflas de ahora en adelante y hasta el periódico a la puerta de su casa. Seré su fiel mozo.
En realidad no sé qué habrá pasado. Fue muy repentina e inesperada la salida de Verónica Vélez Macuil de SET Noticias y del gobierno del estado. A todos nos tomó literal comiendo camote, pero es algo que todos estamos disfrutando.
Bueno, casi todos. Eso sí, hasta a los que les tendió la mano en su momento, ya la andan atacando. Vero Vélez se ha convertido en uno de los personajes de la política poblana más repudiados, ha generado odios, acumulando rencores y hecho enemigos.
Pensó que el poder le duraría para siempre. Pero se le olvidaron sus propias palabras:
“Estamos de paso, estos cargos son de paso y los periodistas siempre se quedan”.
Imagino que lo dijo de dientes para afuera, que lo dijo sin tener consciencia de sus palabras. Y en efecto, la vida es una rueda de la fortuna. Le tocó estar arriba y se dedicó a destruir, ahora que estará abajo tendrá que aguantar todas las embestidas.
Hay investigaciones en contra de Vero Vélez. Hay auditorías por el manejo del presupuesto en medios de comunicación y lo peor para ella es que está sola. No hay alguien que la respalde, la defienda, la proteja.
Ordenó persecuciones contra periodistas, contra secretarios, diputados, alcaldes, activistas, empresarios. Se metió con familias, puso en riesgo a muchas personas, atentó contra muchas personas.
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