La consolidación de la alianza del PAN y el PRI luce muy complicada no solo en Puebla, sino en todo el país y se deberá de abordar todo en un solo paquete. Eso sí, la mayoría de los priistas están consciente que deben ir con los panistas, pero quieren un trato justo, igualitario y con candidaturas.
Esto se los cuento porque ayer por la mañana me enteré de las negociaciones que ambos partidos traen a nivel nacional. La verdad está re bueno el chisme que hasta las uñas me comí de la ansiedad. Imagínense, si yo que soy un simple mortal apartidista, sentí ansiedad, cómo la estarán pasando los involucrados.
El caso es que me platicaron que el PAN ha puesto una serie de condiciones al PRI a cambio de mantener la alianza para el 2023 y 2024. Dichas condiciones involucran o tienen que ver con Puebla, situación que a los priistas poblanos que saben de estas pláticas, ha puesto muy incomodos.
El PAN está dispuestos a jugársela con el PRI en 2023 en Coahuila y EdoMex, los últimos bastiones del expartidazo en el país. Incluso, Marko Cortés no tiene problema en que los priistas lleven mano en las candidaturas a la gubernatura, o sea quiere verse buena onda para que sus nuevos amigos conserven sus bastiones.
Pero la condición es que el PAN en el 2024 lleve mano en las principales candidaturas en Puebla, Veracruz y otros estados. Esto de llevar mano en la entidad poblana implica que ponga candidato a gobernador, a la alcaldía capitalina y la primera posición en la fórmula al Senado.
También la mayoría de las candidaturas a las diputaciones locales, federales y alcaldías.
En este sentido, ¿El PRI a qué postulaciones tendría derecho?
Pues a la candidatura a la alcaldía de Eloxochitlán, de Juan Galindo, de Esperanza, Atzitzintla, Atzitzihuacán y todos los municipios menos representativos. Además se los tendría que dividir con el PRD. Por supuesto, dicha situación tiene muy inconformes a los priistas.
La bronca es que es una negociación nacional, en la que difícilmente podrán intervenir. Si el PRI acepta las condiciones, podrá que salve Coahuila y el Estado de México, pero se perderá en Puebla.
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