Ya amiga Soraya Córdova, no te sulfures.
Ya supe que toda la semana has tenido reuniones en tus oficinas, allá en la 5 Poniente.
Pero no debes de culpar a los amigos transportistas que te han denunciado.
Simplemente debes ser honesta y honorable, pues con todo el dinero que tienes nada te cuesta pagar tus concesiones del transporte público.
Imagina con los 900 mil pesos que se embolsa la organización al mes, ya hubieras pagado esos permisos en lugar de andarle buscando 3 pies al gato.
Recuerda que el que se enoja pierde.
Y con toda la lana que tienes, no serás pobre por pellizcarle un poquito para esas concesiones del transporte público.
¿Para qué sigues dando manotazos en tu mesa larga y carísima de cedro?
Yo sé, te entiendo. Esos concesionarios son unos “Angelitos de lo peor” por denunciarte y es que cómo se atreven a exigir que saques tus rutas piratas de sus trayectos.
Pocos entienden que primero estás tú, después tú y luego tú.
Cómo se atreven a dañar tus finanzas pidiendo que el gobierno del estado te dé trayectos alternos sin que pagues las concesiones.
Son unos malvados por pedir eso y buscar la forma de meterte al redil de la legalidad y la honorabilidad.
Sí, cómo se atreven a manchar esa reputación que has construido todos estos años lucrando… perdón luchando por los pobres.
Ya no vayas a esas reuniones a la Secretaría de Gobernación para pedir que dejen de multar a tus rutas de transporte público, que se olviden que operan en la ilegalidad.
Ya no pagues 30 mil pesos cada vez que hay esos operativos.
Te entiendo, te comprendo y mi solidarizo contigo. Son unos deshonestos que te quieren pegar donde más te duele.
Pero por eso te escribo estas líneas, para pedirte que ya no te enojes, que mejor te legalices esas rutas, así te dejarán de molestar.
Ya no le pegues a la mesa que brilla tanto.
No hagas corajes.
Hasta me dan ganas de darte un abrazo de oso y beso de Bugs Bunny.
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