El problema de los plebiscitos en las juntas auxiliares sí es la organización por parte del Ayuntamiento de Puebla, pero no en particular de una administración. Este caos se viene dando desde hace mucho tiempo, desde administraciones atrás.
Tenía razón el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez en solicitar que fuera el IEE la instancia encargada de llevar a cabo las elecciones en las 17 juntas auxiliares.
Y no por otra cosa, pero el municipio, los recursos humanos y materiales con los que dispone, ya están rebasados por la cantidad de habitantes que hay en las demarcaciones.
Este problema con la falta de organización, con la falta de recursos y la violencia se viene dando desde hace tiempo, si mal no lo recuerdo, en la administración de Blanca Alcalá, también hubo conflictos. Imaginen, estoy hablando de hace 14 años.
No vamos lejos, Claudia Rivera también había declarado que el IEE ya se tenía que hacer cargo de las elecciones en juntas auxiliares, pues es que ya no hay forma en que, por lo menos, el Ayuntamiento de Puebla pueda cargar el peso del desarrollo de éstas.
Si bien hay algunas que aún son consideradas como pueblos, hay otras que ya son todas unas ciudades con problemas tan complejos como la delincuencia organizada, el huachicol, narcomenudeo, y un largo etcétera. También falta que se blinden para evitar que los grupos delictivos financien las campañas que no están reguladas, entre otros problemas.
En la administración de Claudia Rivera se suspendieron las elecciones en 6 juntas auxiliares por violencia, y aunque el Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP) ordenó elecciones extraordinarias en las 6, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación echó abajo los resolutivos del tribunal poblano.
Al final solo se hizo una elección extraordinaria, en la Ignacio Zaragoza, pero hubo inestabilidad en casi la mitad de ellas. Y si no se modifica la forma en que se llevan a cabo estas elecciones o se elevan a rango de constitucionales, los problemas continuarán y cada vez serán peor.
Las juntas auxiliares de Puebla capital en su mayoría, han dejado de ser pueblos, ya no aplican los usos y costumbres en muchas de ellas y es necesario que estos mecanismos para elegir a sus representantes se modernicen.
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