A poco más de cuatro meses de que la SEP permitió a los alumnos el regreso a clases presenciales, cada una de las escuelas, sobre todo las privadas, han operado la reintegración de sus alumnos a las aulas a conveniencia y a criterio personal.

Se ciñen a los lineamientos generales, pero no los siguen al pie de la letra.

En agosto del 2021 se estableció el sistema híbrido de enseñanza, que consistió en permitir que los alumnos regresaran al sistema presencial, en promedio, dos días por semana y los demás tomaran clases en línea.

En ese momento se permitía a los padres de familia decidir no llevar a sus hijos a clases presenciales y, entonces, las escuelas estaban obligadas a brindar el sistema de educación 100% a distancia.

Algunas escuelas turnaron los días y otras obligaron a los padres de familia a elegir entre un sistema y otro: o todos los días presenciales o todo híbrido.

Las peores colocaron al profesor en las aulas con una cámara, para hacer la transmisión de su misma clase, para quienes se quedaran en casa.

Los primeros días de enero, la SEP emitió un comunicado para establecer que todos debían regresar al sistema híbrido, para retomar de a poco la normalidad de las clases. Pero la llegada de Ómicron causó pánico y al final cada quien hizo lo que quiso.

Muchas actúan conforme sus finanzas.

Están las escuelas prefieren el sistema a distancia, porque reducen costos de operación.

Las que se niegan al sistema híbrido porque casi los obliga a duplicar su plantilla de profesores.

Y hay escuelas en las que las clases en línea se dan fuera del horario habitual, para no contratar a un profesor extra y usar a los que tienen.

Otras que hasta el momento siguen postergando el regreso presencial, con el argumento de la variante y que siguen teniendo a los padres en casa, obligados a organizarse para conectar a sus pequeños.

Las universidades, un caso completamente aparte, han optado por casi el 100% a distancia y solo algunos talleres y laboratorios presenciales.

El 10 de enero, el gobernador Miguel Barbosa dio otra indicación, que todas las escuelas estaban obligadas a conservar la modalidad en línea para aquellos que no quisieran regresar por el temor a la cuarta ola.

La confusión, desorganización y el “hago lo que me conviene” es lo que prevalece hoy en los centros educativos de Puebla.

Algunas escuelas, no todas, han usado la pandemia a conveniencia y encontrado la manera de reducir costos.

Eso sí, todos siguen cobrando las mismas colegiaturas, aunque el servicio es diferente.

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Este 11 de enero, casi como celebración de cumpleaños, la dirigente electa del PAN, Augusta Díaz de Rivera envío un mensaje de paz a la militancia.

Ratificó a Eduardo Alcántara y a Humberto Aguilar como coordinadores de las bancadas de los panistas en el Congreso local y en la Cámara de Diputados, en ese caso solo para los legisladores poblanos.

Lo hizo para evitar confrontaciones, en el caso de Alcántara, quien sigue siendo fiel a Genoveva Huerta.

Total, en este momento esas posiciones no son de su interés, no hasta que el 2024 empiece a mover el tablero y entonces sí el Yunque necesite a sus alfiles al frente.