“Aquel que es consciente de temores vagos, obtiene temores reales” por Ryan Holiday
Entre el 9 y el 16 de marzo del 2020, recién se decretaba estatus de pandemia, muchos obtuvimos malas noticias respecto a nuestra actividad económica. A los que bien les fue les redujeron un poco el sueldo, pero a los que más les costó son a los que les cancelaron contratos, ya adjudicados, de un día a otro o de plano los despidieron del trabajo.
Algunos tuvieron la fortuna de poder pagar deudas de tarjetas de crédito, pero la gran mayoría, al verse en desventaja económica, cayeron en las garras de los ofertantes de tarjetas de crédito. Porque si ustedes recordaran, en el 2021 y 2022 hubo una extensa campaña para colocar plásticos con crédito, por lo menos a mí me llamaban de 2 a 3 veces por semana para venderme una de esas líneas de crédito. Pero no solo ofrecían tarjetas de crédito, la estrategia fue ofertar préstamos para el consumo como anticipos de nómina, personales y automotrices. En el cúmulo de la entropía, no se consideró ni por un minuto ofertar créditos empresariales.
Hoy en día estamos viendo el resultado de ese desmedido entusiasmo por colocar prestamos de plástico a corto plazo. El incremento en las tasas de interés propició un incremento sin precedente en la recaudación de las ganancias de los bancos por concepto de intereses. A finales del 2019 Banxico reporto 29.1 millones de tarjetas en el mercado con una oferta crediticia de 410.6 mil millones de pesos; iniciando la pandemia muchos cautelosos cancelaron sus plásticos y el número de estos disminuyo hasta 27 millones para finales del 2021. En todo el 2022 hubo un crecimiento de colocación de créditos y el número de plásticos volvió a subir a 28.8 millones
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Por otro lado, la retórica económica que menciona que la inflación solo beneficia a los ricos es totalmente cierta; la inflación ha estado desmedida en el último año y llevó al Banco de México a ajustar la TIIE de 4.5 % hasta 10.5 %. Con esta justificación los bancos han subido sus tasas en tarjetas de crédito hasta un 70% anual, una grosería.
El punto amigos es que los bancos ganaron 35% más que en el 2019 simplemente en cobro de intereses a prestamos para el consumo. Las ganancias de los bancos llegaron a 236,743 millones de pesos, y el 75% de estas ganancias se quedó en los 5 grandes como BBVA, Banorte, Santander, CITIBANAMEX, SCOTIABANK Y HSBC.
Mi recomendación es irse con cuidado en los créditos a corto plazo, pagando a tiempo sin que des opción a cobro de intereses por parte de los bancos.
Comentarios: Jorge.medinasal@gmail.com
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