Antes de iniciar, deseamos a Edmundo Velázquez Vargas muchos éxitos en esta nueva etapa como director de Periódico Central.
Se trata de un periodista preparado, capacitado para tomar el timón y sin duda habrá de darle un nuevo enfoque al portal.
Enhorabuena, Mundo.
Vamos con nuestra entrega de este lunes.
Durante varios meses el panorama se mostró turbio, agitado. Sin embargo, poco a poco las aguas toman su nivel.
El horizonte se aclara y todo indica que la sucesión poblana cada día está más definida.
De manera indiscutible, inapelable el senador Alejandro Armenta tiene un capital político considerable.
Su trabajo inició desde el sexenio de Manuel Bartlett. En el periodo de Melquiades Morales siguió recorriendo el estado. Se debe subrayar que su despegue fue en la etapa de Mario Marín. Realmente en esos años construyó una estructura estatal rumbo a la gubernatura.
Más adelante, durante el morenovallismo saltó a la política nacional, primero en el PRI de Peña Nieto y luego en Morena gracias a la apertura que le brindó Rocío Nahle y finalmente a la mancuerna con Ricardo Monreal.
Sin duda Alejandro goza de números favorables en el estado, empero también es evidente que sucumbe bajo estados de fuerte presión.
En esta etapa reciente, durante la puja de 2023, Armenta ha perdido puntos de manera acelerada y todo se debe a un proceder intempestivo, impetuoso.
Antes de continuar se debe acotar que sus adversarios no le han lanzado campañas de lodo o anónimos electrónicos.
La guerra sucia no surge de los grupos de Nacho Mier o Julio Huerta. Ahí no se practica el juego de armar páginas falsas.
Puebla sabe de dónde salen las carretadas de estiércol. Todas esas campañas negras van en detrimento de su autor.
Concluye el paréntesis.
Volvamos al proceder del suspirante Armenta.
Por momentos es como un adolescente manejando un Audi R8 en el periférico poblano.
Es inevitable recordar los efectos de la presencia de Héctor Alonso Granados. Posteriormente las críticas de los grupos feministas ante la falta de una postura sobre el aborto. El legislador señaló que no es un tema “de su incumbencia”, lo que desbordó acres señalamientos de las feministas.
Luego la polémica que desató con la comunidad lésbico, gay, transgénero, transexual sobre las infancias trans.
Se debe subrayar la influencia social de la mencionada comunidad. Luego de los resultados mostrados en ‘La casa de los famosos’ Wendy Guevara se convirtió en el emblema de grupos que por años han sido discriminados.
Fue otro grave error del suspirante.
Semanas después se cayó la intención de crear un bloque con Julio Huerta Gómez contra Ignacio Mier. El exsecretario de Gobernación no compró la invitación para armar un pandemónium.
Pero sin duda el terremoto político fue su asesor tratando salir de la crisis del Audi R8. Simplemente no pudieron hilvanar una respuesta congruente frente a la dimensión del desastre.
En todos estos casos sus adversarios no intervinieron, no metieron la mano.
Todas fueron expresiones, desaciertos, pifias y errores del mismo Alejandro y su equipo.
En términos futbolísticos hemos visto una sucesión de autogoles.
Julio Huerta y Nacho Mier siguen jugando en la media cancha mientras Armenta trata de despejar pero el balón toma una trayectoria curva y entra en su propia portería.
Es una descripción de la realidad tal cual. El lector es testigo.
Como siempre quedo a sus órdenes.
X (antes twitter) @CupulaPuebla
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