El agua es un recurso indispensable para el sostenimiento diario y se incrementó la demanda del vital líquido con la pandemia del coronavirus, pues las medidas sanitarias exigen el lavado constate de manos y la desinfección de espacios para evitar posibles contagios; en este contexto, el acceso al agua aumentó 4% en el estado de Puebla.
La Secretaría de Bienestar federal actualizó sus informes anuales sobre la situación de pobreza y rezago social 2022, en los que Puebla aparece con todas las carencias por encima del promedio nacional, rubros como rezago educativo, acceso a los servicios de salud, seguridad social, calidad y espacios en vivienda, servicios básicos, así como acceso a la alimentación de calidad y nutritiva.
En el informe revisado por #DandoData destaca que prácticamente todas las carencias aumentaron en el estado, como lo había dado a conocer Coneval desde el año pasado, pero uno de los rubros donde la entidad mostró avance fue en el de acceso al agua, pues la población con esta carencia pasó de 14% a 10.1% entre lo reportado en 2021 y 2022.
Cuando inició la pandemia del coronavirus, en Puebla se implementaron distintos programas para garantizar el abasto de agua y que las personas pudieran cumplir con las medidas sanitarias como el lavado constante de manos y la sanitización de los espacios comunes.
El acceso al agua no era sólo una preocupación por los cuidados en casa y espacios públicos, pues cuando regresaron los estudiantes de educación básica a clases presenciales no se tenía una cobertura completa de este recurso en las escuelas, cerca de 2 mil planteles no contaban con el servicio.
Aumenta el acceso al agua en Puebla
La Secretaría de Bienestar federal publicó sus informes anuales sobre la situación de pobreza y rezago social 2022, la dependencia los integró con indicadores del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), los cuales se actualizaron el año pasado.
En la comparativa, destaca una baja en la población sin vivienda digna, pues de acuerdo con la dependencia federal, en su informe de 2021, eran 744 mil 700 personas que vivían en espacios con materiales de baja calidad, como pisos de tierra, techos y muros de material endeble; en el de 2022 se asentó que son 685 mil 900 personas en esta condición.
En cuanto a los servicios básicos de vivienda, aumentó ligeramente la población que reportó carencias, pues en el informe de la Secretaría de Bienestar de 2021 se contabilizaron un millón 692 mil 100 personas que reportaron falta de agua, electricidad, drenaje y chimenea para usar leña o carbón al cocinar; para 2022 esta cantidad pasó a un millón 735 mil personas.
Pese a la tendencia de aumento de personas sin servicios básicos, en el caso de acceso al agua mejoraron las cifras, ya que en el informe de 2021 se señaló a 894 mil 800 personas equivalentes al 14% de los habitantes no tenían agua y para 2022 fueron 669 mil 700 personas, que representan el 10.1%.
Lo mismo ocurrió con la cantidad de personas sin drenaje, pues de acuerdo con el informe de 2021 eran 400 mil personas sin este servicio y representaban al 6.3% de la población; mientras que en 2022 se indica que son 393 mil personas con esta carencia, equivalentes al 5.9% de la población.
En contraste, aumentó la cantidad de personas sin electricidad al pasar de 4 mil 800 a 5 mil 900, mientras que las personas sin chimenea cuando usan leña o carbón para cocinar pasaron de 890 mil 200 a un millón 84 mil 900 en el último año, según la Secretaría de Bienestar.
Además de las cifras generales en materia de pobreza, CENTRAL documentó que en Puebla seis de cada 10 hogares carecen de los recursos necesarios para alimentarse adecuadamente, ante la disminución de sus ingresos y pérdida de empleos por la pandemia del coronavirus.
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