Aurelio García, de 27 años, perdió la vida cuando un sujeto le enterró una navaja en su pecho, durante una riña de fútbol llanero en el campo tres del Infonavit de Amalucan.
El asesinato ocurrió la tarde del 22 de marzo de 1981, cuando faltaban pocos minutos para que finalizará el partido entre el Botafogo y los Pumas del Barrio de Xonaca.
De acuerdo con la declaración de José Segura, árbitro de liga Junta de Mejoras, la pelea inició por una falta que Gerardo García, jugador del Botafogo, cometió a Ignacio Ortega, miembro del equipo rival.
Después de marcar la infracción a favor de los Pumas del Barrio de Xonaca, el árbitro finalizó el encuentro porque los futbolistas comenzaron a agredirse.
Trifulca
Al hacer el intento de separar a su hermano, tres jugadores del equipo contrario recibieron a Aurelio García con patadas y puñetazos.
En ese momento, un sujeto que apoyaba al equipo de los Pumas del Barrio de Xonaca se le acercó por la espalda y lo hirió con un arma blanca.
Al atestiguar el ataque que sufrió su compañero, los integrantes del Botafogo trataron de atrapar al agresor.
Sin embargo, los jugadores de los Pumas del Barrio de Xonaca escaparon, junto con el sujeto que lesionó a Aurelio García, abordo de un auto Datsun y en un Dodge Dart.
Desenlace
Cuando trasladaron a Aurelio García al Hospital de la Cruz Roja, su cuerpo ya no tenía signos vitales.
Sin aportar características de su rostro, los miembros del Botafogo describieron al agresor como un sujeto alto, moreno, de pelo negro y lacio.
En el campo quedaron el registro de algunos jugadores del equipo Pumas del Barrio de Xonaca, un pantalón, unos zapatos y calcetines.
(Con información de Francisco Javier Madrid, periodista de El Sol de Puebla)