Al recibir 10 impactos de arma de fuego, un avión bimotor XB-CIM se desplomó en Ciudad Serdán. Por el incidente, José Humberto Vázquez, piloto de la aeronave, y su acompañante, perdieron la vida.
La tarde del 28 de enero de 1972, habitantes de las faldas del volcán del Pico de Orizaba observaron una aeronave que, antes de estrellarse, lanzaba mucho humo. Al perder altura, el avión despedazó tres pinos y cayó en un cerro cercano a la población González Ortega.
Cuando llegaron al sitio en donde ocurrió el accidente, elementos del Ministerio Público encontraron, en un área de 150 metros, restos humanos y partes de la aeronave, propiedad del Consorcio Industrial Mexicano de Monterrey.
La Agresión
Al recabar indicios del incidente, el agente del Ministerio Púbico, José Humberto Vázquez Rodríguez, descubrió seis disparos de un rifle M2 en el tanque de combustible y otros cuatro impactos de arma de fuego en el depósito de aceite.
Debido a los actos de rapiña, los agentes del Ministerio Público solo lograron recuperar la licencia del piloto, indicadores de vuelo, rutas y un radio de navegación aérea.
Traslado
Agentes del Ministerio Público llevaron los cuerpos de las víctimas al anfiteatro del Hospital Regional de Ciudad Serdán. El cadáver del acompañante del piloto permaneció en calidad de desconocido.
Para que elementos de la Dirección General de Aeronáutica Civil investigaran la causa del accidente, los restos del avión los trasladaron en un camión de carga a la XXV Zona Militar.
(Con información de Héctor Martínez y Ernesto Genis, periodista y reportero gráfico del periódico El Sol de Puebla. Fondo: Hemeroteca del Estado de Puebla Juan Nepomuceno Troncoso)