Familiares de los primos Juan Carlos Negrete Vargas y Erick Alejandro Negrete Palmieri, reportados como desaparecidos desde el viernes 27 de agosto, confirmaron que fueron localizados sin vida y que se trata de los dos cuerpos encontrados semicalcinados y decapitados en Izúcar de Matamoros.
Aunque aún esperan los resultados de las pruebas de ADN que les realizaron a familiares de ambos desaparecidos y se determine el dictamen de los expertos en medicina forense de la Fiscalía General del Estado, entre los amigos y cercanos de Juan Carlos y Erick Alejandro ya se dio como un hecho la muerte de ambos.
Los familiares confirmaron a través del reconocimiento físico de los cuerpos, que se sometieron a las pruebas genéticas para empatar con los restos encontrados en Izúcar, por lo que sólo esperan que la Fiscalía corrobore el dictamen de ADN.
Como PÁGINA NEGRA informó, Juan Carlos y Erick Alejandro acudieron a un domicilio de la colonia La Paz a una entrevista de trabajo y después se les trasladó a Izúcar donde supuestamente tenían que ser entrevistados nuevamente, ya que les ofrecían laborar como escoltas personales de un funcionario público en la zona. Sin embargo sus familiares ya no tuvieron noticias sobre ellos desde ese viernes.
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La noche del martes 31 de agosto a unos 20 metros de la carretera federal Puebla-Huajuapan de León, tramo Izúcar-Huajuapan fueron encontrados decapitados, semicalcinados y devorados por animales, dos cadáveres en inmediaciones del relleno sanitario del municipio de Izúcar de Matamoros.
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La autoridad municipal confirmó que se trataba de los cadáveres de dos hombres, por lo que el área del hallazgo fue resguardada y acordonada por los policías y elementos de la Guardia Nacional (GN). Se pidió la intervención de personal de la Fiscalía General del Estado (FGE). Se reportó que los cuerpos estaban parcialmente calcinados y decapitados, los cuales en apariencia fueron devorados por animales de la zona.
La coincidencia de que se tratara de dos hombres hizo sospechar a los familiares quienes comenzaron con los trámites para solicitar la confronta de ADN con ambos cuerpos y el reconocimiento físico de los cadáveres, los cuales coincidieron por lo menos con los detalles físicos y señas particulares de Juan Carlos y Erick Alejandro.