El sacerdote Francisco Javier Bautista Ávalos fue sentenciado a 27 años y seis meses de prisión por el asesinato del estudiante Leonardo Avendaño, cometido en 2019.
Además de los años privado de la libertad por el delito de homicidio calificado, un tribunal de enjuiciamiento dictó que el sacerdote deberá pagar a la familia del seminarista 422 mil 450 pesos por concepto de reparación del daño, indemnización y gastos funerarios.
Josué Avendaño, hermano de Leonardo, dijo en entrevista con Milenio que esperaban que un Juez dictara la pena máxima contra el sacerdote Francisco, pero destacó su satisfacción por alcanzar justicia.
Pues siempre me hubiera gustado la pena máxima, pero con poderle hacer justicia a mi hermano me es más que suficiente, expuso.
Desde el 6 de abril un Juez de la Ciudad de México encontró culpable al sacerdote por su responsabilidad en el delito de homicidio, pero fue hoy cuando dictó la sentencia. La próxima audiencia de lectura y explicación de la sentencia al sacerdote se llevará a cabo el 13 de abril.
Francisco Javier Bautista fue detenido por la entonces Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México el 19 de junio de 2019.
El sacerdote tenía 15 años como responsable de la parroquia a la que asistía el seminarista, señaló en aquel entonces Procuraduría capitalina.
De acuerdo con la investigación, la Fiscalía llegó hasta él porque antes de desaparecer, el seminarista le envió a su hermano un mensaje en el que la confirmaba que se reuniría con el sacerdote.
Dos días después el cuerpo de Leonardo Avendaño fue hallado con signos de tortura y asfixia dentro de un vehículo.
Uno de los defensores más activos del sacerdote sentenciado fue Hugo Valdemar, exvocero de la Arquidiócesis cuando estuvo al frente Norberto Rivera.
Valdemar aseguró que Bautista Ávalos nunca salió de su cuarto la noche del homicidio y que incluso no tuvo ningún contacto con Leonardo, también acusó a las autoridades de manipular las imágenes, de borrar algunas y esconder otras.
La FGJ-CdMx informó sobre la sentencia que obtuvo en contra del sacerdote Francisco. Foto: FGJ-CdMx.
Leonardo Avendaño Chávez, alumno de la Universidad Intercontinental (UIC), fue hallado sin vida al interior de su camioneta, el 12 de junio de 2019, con signos de tortura y asfixia, luego de que fuera reportado como desaparecido en la Ciudad de México.
Leonardo cumplía dos semanas de haberse titulado de la maestría en Psicoterapia Psicoanalítica y planeaba seguir su proceso religioso para ordenarse como sacerdote, pero fue asesinado. Durante años, la familia del joven exigió justicia por el esclarecimiento del caso, identificación, detención y castigo a los culpables, así como un alto a la violencia.