Con jacuzzi, alberca, chapoteadero, palapa para eventos y un ruedo de toros cuenta el rancho “El Jazmín”, una de las tres propiedades que cateó la Fiscalía General del Estado de Puebla al presunto huachicolero Antonio Martínez Fuentes, “El Toñín”, en Palmar de Bravo y Quecholac.
De acuerdo con las versiones de algunos de los vecinos de los municipios mencionados, el rancho ya no pertenece ni a Martínez Fuentes ni a su familia, y fue adquirido hace años. A pesar de estos la dependencia realizó un fuerte operativo en el cual localizó incluso un túnel en la propiedad.
Ver: Fiscalía catea tres ranchos de El Toñín en Palmar de Bravo y Quecholac
Como PÁGINA NEGRA informó, el pasado 21 de octubre miembros de la Fiscalía General del Estado informó que se catearon tres ranchos, relacionados con el presunto huachicolero. La dependencia confirmó que en uno de los inmuebles localizó un túnel y detuvo a dos miembros de la banda delictiva, aseguró ocho armas largas, droga y más de 100 cartuchos útiles.
Según informó la Fiscalía, las diligencias iniciaron en el rancho “El Jazmín”, en la localidad de San Bartolomé Coscomaya, municipio de Quecholac. Ahí los agentes investigadores ubicaron un túnel con aproximadamente 50 metros de longitud, profundidad de 10 metros y que seguía en proceso de excavación.
El sitio ha sido utilizado como un espacio para eventos privados y multitudinarios; aún se encontraba en activo por la fuerte actividad ganadera en él y los acabados de sus zonas de descanso son de lujo.
En la serie de cateos, la Fiscalía detuvo a dos hombres armados, Antonio N. y Delfino N., quienes al parecer se encontraban contratados para la vigilancia de uno de los predios intervenidos por la Fiscalía General del Estado.
Este fin de semana, a Antonio N. y Delfino N. fueron enviados a prisión preventiva, después de que el Juez de Control en Tehuacán consideró legal su detención, y les impuso la medida cautelar de prisión preventiva necesaria. Posteriormente, el Agente del Ministerio les imputó los delitos de resistencia de particulares y portación de arma de fuego sin licencia correspondiente. Esta misma semana se definirá su vinculación a proceso por ambos delitos.
A pesar de que Martínez Fuentes constantemente usaba las redes sociales para declarar que era objeto de una persecución de tipo político, se ha mantenido en silencio y no ha utilizado su cuenta personal de Facebook.