Seguramente ya sabes que en Twitter se ha hecho viral el hashtag #AbortoClandestinoBUAP con el cual se ha iniciado una campaña de desprestigio contra una alumna de Medicina de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla por hablar sobre el aborto en Facebook.
Fue el usuario Christer Espino quien difundió capturas de pantalla sobre la conversación en redes sociales refiriendo que la doctora representante del grupo “Medicina por el derecho a decidir”, y una estudiante de dicha facultad “realizan abortos clandestinos hasta las 24 semanas”.
El tuit rápido provocó el acoso, hostigamiento y amenazas de personas y grupos pro vida en los perfiles de Facebook de las mujeres que formaron parte de la conversación y exigieron a la BUAP tomar represalias contra todas las alumnas que formen parte del movimiento, pues las acusan de dar una mala imagen a la máxima casa de estudios.
Por el contrario, médicos y organizaciones feministas del país que apoyan el derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos y la interrupción del embarazo, salieron en defensa de las jóvenes que fueron criminalizadas y señaladas en redes, pues difundieron sus rostros, nombres e información personal, situación que pone en riesgo su identidad e integridad.
Nos solidarizamos con las morras que siguen resistiendo a través de colectivas que brindan información útil, prioriza y acompaña a mujeres. El #AbortoClandestinoBUAP no es más que una expresión de odio más a nosotras por decidir sobre nuestra cuerpa. @MedicinaEl #AbortoLegal pic.twitter.com/omu6E0uKOs
— Las Catalinas (@LasCatalinasMx) March 31, 2021
Lo que hace este grupo, como muchos en el país y en el mundo, es brindar información para realizar un aborto seguro en casa, por lo que los activistas defienden que sólo se da una información. Ésta se encuentra además disponible en la página de la Organización Mundial de la Salud (OMS), donde se difunde una guía de “Tratamiento médico del aborto”.
Este tratamiento ha sido celebrado, pues reduce la necesidad de personal especializado que se requiere para un aborto quirúrgico y “ofrece a las embarazadas una opción incruenta y aceptable, según señala la propia OMS.
El misoprostol se usa en los abortos llamados “médicos” o farmacológicos que se diferencian de los quirúrgicos, aquellos que implican la dilatación y evacuación uterina y que a su vez se dividen en abortos de vaciado manual (AVM) o vaciado eléctrico (AVE).
Según la Ley Olimpia aprobada en Puebla, el “doxing” (publicar información privada sin consentimiento de la persona) es considerado una forma de violencia mediática contra las mujeres, delito en el que estaría incurriendo Christer Espino y todos aquellos que divulgaron videos e imágenes con la información de las jóvenes.
Las sanciones podrían ser penales o administrativas y pueden alcanzar entre tres y seis años de prisión o multas de 500 a mil unidades de medida y actualización.
“Una campaña de criminalización y pánico moral”
El Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) emitió una postura para aclarar que todas las personas que forman parte de esta campaña de criminalización no están denunciando un delito y lo único que provocan es pánico moral.
Con respecto a esto, Odesyr informó:
La Constitución contempla los derechos reproductivos, entre ellos la libertad y autonomías reproductivas, así como el derecho a la información sobre salud reproductiva y los informes sobre cualquier avance científico en la materia”.
La doctora y estudiantes no están “practicando abortos clandestinos” como se señala en la publicación de Espino, brindan un proceso de acompañamiento con información avalada por instituciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud, lo cual no es un delito.
El marco jurídico nacional no contempla en sus Códigos Penales una temporalidad de “23 semanas” para la realización de un aborto en cuatros excluyentes de responsabilidad penal: violación, peligro de muerte, imprudencia o malformaciones eugenésicas graves, por lo que el señalamiento sólo provoca pánico moral e infodemia.
En resumen, las mujeres –y la población en general– tienen el derecho de informarse sobre temas de sexualidad y reproducción de manera clara, oportunidad y científica para recibir educación integral y el acceso a métodos oportunos para decidir el número de hijos que se desea tener.
La organización poblana hizo un llamado para evitar exponer, difamar y criminalizar a quienes brindan acompañamiento a las mujeres que deben recurrir a métodos abortivos sin la aprobación de un médico porque la interrupción del embarazo es ilegal en Puebla y en otros estados del país.
También invitaron a la Benemérita a realizar las denuncias correspondientes para brindar protección a sus alumnas.
Vamos a empezar el día con un hilo sobre por qué lo que la chavita de la derecha está haciendo no es denunciar un delito, sino puro pánico moral.
— Odesyr AC (@odesyr) March 31, 2021