La pandemia del coronavirus agravó las condiciones de pobreza que ya vivían cientos de familias en Puebla, y se incrementó en casi 500 mil el número de personas que no tienen recursos suficientes para comprar una canasta básica, según datos del Coneval. Ahora, siete de cada 10 habitantes de la entidad se encuentran en esta situación.
El Coneval presentó este jueves su Medición de Pobreza 2020, en la que Puebla destaca como el tercer estado con mayor porcentaje de la población en condiciones de pobreza, y en los últimos dos años la entidad sumó 380 mil 300 nuevos pobres, en total hay 4 millones 136 mil personas con carencias.
A siete de cada diez poblanos no les alcanza ni para la canasta básica: Coneval
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Cuando la población tiene recursos inferiores a la línea de pobreza por ingresos, se le conoce comúnmente como pobreza laboral, en este indicador se considera al total de personas que no tienen recursos suficientes para comprar una canasta básica y otros insumos necesarios para subsistir, esta cifra pasó de 4 millones 165 mil 900 en 2018 a 4 millones 634 mil 100 personas en 2020.
Además, el Coneval mide a las personas que tienen recursos inferiores a la línea de pobreza extrema por ingresos, es decir, el grupo que tiene todavía menos recursos que apenas le alcanzarían para alimentarse, esta cifra pasó de un millón 151 mil 400 personas en 2018 a un millón 737 mil 200 en 2020.
De acuerdo con el Coneval, las líneas de pobreza por ingresos son una referencia monetaria para medir el bienestar económico de la población, como parte de la medición multidimensional de la pobreza. Este parámetro permite conocer si las personas tienen recursos suficientes para adquirir la canasta básica y los insumos básicos para subsistir.
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Pobreza y más pobreza por ingresos insuficientes
La medición del Coneval considera dos variantes para medir el bienestar económico de las personas: la línea de pobreza por ingresos y la línea de pobreza extrema por ingresos.
En la línea de pobreza por ingresos, se consideran los recursos que tienen las personas para atender sus necesidades básicas, tanto las alimentarias como las no alimentarias, es decir, las de salud, transporte, limpieza, educación, esparcimiento entre otras.
El 69.9% de la población no cuenta con ingresos suficientes para cubrir las necesidades de esta canasta básica tanto alimentaria como no alimentaria, equivalente a 4 millones 634 mil 100 personas.
Mientras, la línea de bienestar de pobreza extrema por ingresos es aquella en la que apenas se pueden cubrir las necesidades alimentarias. Este rubro tiene un incremento importante, ya que en porcentajes pasó de 17.8% a 26.2% entre 2018 y 2020.
En términos reales, el incremento es todavía más notorio, ya que la cifra de personas en pobreza extrema por ingresos pasó de un millón 151 mil 400 en 2018 a un millón 737 mil 200 en 2020.
