Puebla, 19 de abril del 2024

Algunas consideraciones sobre la ansiedad

Por Betzabé Vancini / /
Algunas consideraciones sobre la ansiedad
Fotos: Central

Tú, yo y el Ello...

La ansiedad es una condición de salud mental que va tomando relevancia y que, especialmente, se agudizó con la contingencia. El encierro, la enfermedad, la muerte de algún familiar, la pérdida del empleo o la imposibilidad de asistir a la escuela, se volvieron factores que detonaron crisis de ansiedad en toda la población alrededor del mundo. Durante el último año en México, se ha incrementado la demanda de atención psicológica por problemas de ansiedad cerca de un 90%, es decir, prácticamente se ha duplicado y lo alarmante es que ha alcanzado a población cada día más joven.

La ansiedad es, además, un problema muy poco entendido que frecuentemente, es minimizado con un “échale ganas”, “no seas tan nervioso/a”, o que recibe tratamientos inadecuados y no siempre efectivos como aroma terapia, tés, oraciones, etcétera, que si bien pueden aliviar un poco a algunas personas, para otras pueden ser completamente inútiles y hacerles sentir que están “tan mal” que ni siquiera eso les ayuda.

Se calcula que para 2022, los trastornos de ansiedad y los ataques de pánico van a ser la segunda causa de discapacidad laboral sólo después de la depresión. Es por esto, que decidí hacer esta columna con algunas consideraciones sobre la ansiedad esperando que sea más fácil comprenderla y no tomarla a la ligera, sino tratarla de manera adecuada con un especialista.

– Lo primero que hay que saber es que nadie elige ser ansioso. La predisposición a padecer problemas de ansiedad viene, en gran medida, de nuestra genética. Y posteriormente, esta condición se desarrollará según nuestros factores familiares, culturales y ambientales.

– Es frecuente que las personas con ansiedad sientan que el mundo les sobrepasa y que todo es muy intimidante.

– Les cuesta tomar decisiones porque tienen mucho miedo a equivocarse.

– La persona que la padece tiene dificultad para mantener su mente en el presente. La mente va del pasado al futuro causando angustia e incapacidad para frenar la imaginación de escenarios catastróficos de enfermedad, desempleo, problemas personales, de pareja, etcétera, que comúnmente no han pasado.

– Produce sensaciones físicas muy incómodas: aceleración del ritmo cardiaco, sudoración de manos, respiración entre cortada, presión en el pecho, mareos, entre muchos otros que pueden confundirse frecuentemente con un infarto y que alarman aún más a quien la padece.

– Es común que la ansiedad se somatice de manera física y que se produzcan padecimientos como: trastornos intestinales, problemas musculares, insomnio, problemas en la piel, migrañas o dolores de cabeza, afectaciones visuales, entre otros y que llevan a la persona a asistir con distintos médicos en busca de la causa de su malestar.

– La persona frecuentemente se encuentra en la disyuntiva entre aislarse o buscar compañía, pues no se siente bien alrededor de otras personas, pero la soledad acentúa los síntomas en algunas ocasiones.

– Dado que es una condición que parte de interacciones neurobiológicas como la producción de cortisol y adrenalina, no es algo que pueda controlarse a voluntad. Y por esta razón, no puede curarse únicamente con voluntad sino con atención especializada.

– En México cerca del 89% de la población padece problemas de ansiedad y la mayoría de estas personas no han sido diagnosticadas de manera adecuada y por lo tanto, no tienen acceso a un tratamiento efectivo para esta condición.

– La ansiedad no se cura, sin embargo, con el tratamiento adecuado con profesionales de la salud mental se vuelve manejable, tolerable y mucho menos molesta o angustiante de lo que se presenta sin tratamiento.

Si tú o alguien cercano se identifican con los signos de un padecimiento de ansiedad, no dudes en acudir a consulta psicológica y empezar a trabajar en ti. No hay ninguna necesidad de sufrir y puedes tener una vida plena mucho más tranquila.

Como siempre, estaré atenta a todos tus comentarios y preguntas vía Twitter; me encuentras como @betzalcoatl.