Puebla, 23 de abril del 2024

Geno contra Augusta, las últimas horas

Por Viridiana Lozano / /
Geno contra Augusta, las últimas horas
Foto: Central

Guía para irreverentes

En los últimos minutos de la contienda interna de Acción Nacional las cosas se están poniendo bastante pesaditas.

Entre la guerra de operadores, señalamientos y traiciones, quién sabe cómo vayan a llegar a la votación en urnas, que será el próximo 14 de noviembre.

Mediáticamente el ambiente se calentó con la renuncia de Chucho Morales al cargo que en Acción Nacional le había dado Genoveva Huerta  y su inmediata suma al equipo de Eduardo Rivera. Hasta foto se sacaron y todo.

La verdad sí se la voló el junior, pues fue la dirigente del PAN quien le ayudó a consolidar su candidatura y quien después lo rescato con un cargo, de medio pelo, pero un cargo para que al menos pudiera seguir su vida política.

#TantitaMadre usaron los afines a Genoveva para criticarlo públicamente en redes.

Ningún columnista, respetable claro, se atreve a vaticinar cuál será el resultado de la elección. Los grupos de ambos bandos, cuando son cuestionados sobre ello, responden igual: “creemos que vamos a ganar, pero puede que no”, sí, aunque parezca broma.

Los que están con Genoveva Huerta creen que podría afectarles la operación de los alcaldes Eduardo Rivera y Edmundo Tlatehui, a la que se ha sumado también Blanca Jiménez y ahora Chucho Morales.

Por otro lado, quienes están con Augusta Díaz de Rivera creen que puede jugar en contra el hecho de que Huerta tenga el control del partido y de la comisión electoral.

En medio de la desesperación por tener el tiempo encima y sin una tendencia clara, los grupos han empezado a filtrar una supuesta operación del gobernador a favor de la planilla de Augusta Díaz de Rivera y Marcos Castro.

No se dejen engañar.

El gobierno del estado tiene suficientes temas que atender, la explosión en Xochimehuacan, entre muchos otros, como para andarse metiendo en una contienda interna que depende únicamente de los militantes del partido.

Lo único que hará Miguel Barbosa será esperar a ver quién resulta ganador solo para saber con quién tendrá interlocución para temas políticos. Nada más.

Piensen también que en la elección constitucional el gobierno siempre mantuvo esa postura, la de estar al margen del proceso ¡creen que se van a manchar por la contienda de un partido político!

Así que si reciben llamadas diciéndoles que hay una instrucción del gobierno para votar por tal o cual candidato, no se la crean.

La proyección es que en la contienda interna voten unos 8 mil militantes.