Juliette Parker había ofrecido una sesión gratis de su trabajo a todas las madres que le permitieran tomar imágenes de sus recién nacidos, a través de un anuncio en Facebook.
Engañó a una
De acuerdo con la publicación, ofrecía esto a fin de querer aumentar su portafolio y así mejorar su situación laboral. Una de las señoras que vio este comunicado aceptó la oferta y recibió a la supuesta fotógrafa en su casa.
Durante las tres sesiones que se hicieron, la tutora del menor notó que Juliette actuaba de forma extraña, ya que se tomó varias selfies con el bebé y además limpiaba constantemente las huellas digitales de cualquier objeto que tocaba.
En el último de estos encuentros, la mujer llevó consigo a su hija de 16 años de edad, quien le ofreció un pastelillo a la madre del niño.
Tras ingerir este alimento, la anfitriona comenzó a sentir sueño, entumecimiento y comenzó a vomitar. Pese a esto, la mujer pudo expulsar a las dos visitantes de su casa.
Las autoridades creen que Parker pretendía robarse al niño para criarlo como suyo. No es la primera vez que la señora tiene problemas con la ley, pues en 2014 fue arrestada por allanamiento y robo.