Siguen saliendo a la luz casos de menores de edad que son víctimas de maltrato y abusos cometidos por sus propios padres. Al igual que Yaz, hay muchos pequeñitos en Puebla que se debaten entre la vida y la muerte por falta de atención de sus familiares.
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Este día, el gobernador del estado, Miguel Barbosa, dio a conocer el caso de un bebé de 2 meses de edad que presentaba tapones de toallitas húmedas en fosas nasales, faringe y laringe. Por estos hechos, el padre está detenido y la mamá sigue prófuga pues ya cuenta con una orden de aprehensión.
Durante la rueda de prensa, Barbosa explicó que la presidenta del DIF, Rosario Orozco Caballero, fue contactada por una delegada —no especificó cuándo ni de qué municipio— que le pidió apoyo porque tenían un bebé de 2 meses de edad que ya estaba a punto de morir.
La delegada del DIF le dijo: Charo, se nos muere un niño acá y no sabemos cómo salvarlo
Rosario Orozco Caballero envió una ambulancia para que el menor fuera trasladado al Hospital del Niño Poblano donde, después de realizarle varios estudios, los médicos se percataron que tenía tapones de toallitas húmedas en fosas nasales, laringe y faringe.
Dos días después, el pequeño fue estabilizado y ya se encuentra fuera de peligro.
Derivado de las investigaciones correspondientes, la Fiscalía General del Estado detuvo al padre del menor y giró una orden de aprehensión contra la mamá, quien actualmente se mantiene prófuga. Además, el DIF se quedó con la custodia definitiva del menor dado que los abuelos también iban a ser detenidos.
El chamaquito a los dos días lo teníamos en excelente estado. Hoy está en la cárcel el papá y tenemos orden de aprehensión contra la mamá e iba a haber orden de aprehensión contra los abuelos, contra todos y les quitamos la custodia porque así lo protegemos.