El gobierno de Puebla —a través de la Dirección Jurídica de la Secretaría de Salud—presentó denuncias penales ante la Fiscalía General del Estado (FGE) y la delegación de la Fiscalía General de la República (FGR) para que se determinen responsabilidades por el caso del bebé prematuro que fue declarado muerto y seis horas después, fue hallado vivo en el mortuorio del Hospital de La Margarita del IMSS.
Esta mañana, el gobernador Miguel Barbosa fue cuestionado sobre la reunión que tendría con el director del IMSS, Zoé Robledo, para darle a conocer este caso y pedir que fuera sancionado; sin embargo, el mandatario declaró que prefirió proceder legalmente.
No vamos a dejar que eso quede sin sanción, son hechos que ocurrieron en el estado de Puebla.
Se espera que, con las denuncias presentadas, las autoridades competentes investiguen lo ocurrido y determinen si hay delitos cometidos, negligencia médica o todas las faltas en que se pudieran incurrir y quién o quiénes fueron los responsables de decretar la muerte de un recién nacido que estaba vivo.
Fue el pasado 22 de octubre cuando Miguel Barbosa anunció que se quejaría con Zoé Robledo por el caso ocurrido en el Hospital de La Margarita. En ese momento, explicó que, aunque los hechos no ocurrieron en un hospital de la Secretaría de Salud, no se podía ver como algo que quedó sin sanción.
En tanto, el bebé que llevará por nombre Lázaro, se encuentra estable en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales.
Su madre, la señora Elisa, fue dada de alta la tarde del pasado 24 de octubre pero la mañana del día siguiente su presión se elevó y nuevamente fue hospitalizada.