Tres artefactos explosivos han sido colocados en distintos puntos de Tecamachalco en menos de 10 días; los vecinos de la población temen que alguna banda de la delincuencia organizada se encuentre detrás de las explosiones y temen que, si las autoridades municipales y estatales no les ponen un alto, haya más heridos.
El primer artefacto fue colocado la noche del 30 de agosto, alrededor de las 20:00 horas de la noche en la calle 13 Oriente entre 6 y 8 Sur, en el barrio de San Nicolás.
La explosión cimbró varias viviendas y aunque no se encontraron personas heridas o fallecidas, los vecinos reportaron que de ese mismo lugar, habían levantado a un hombre dos días antes, el 28 de agosto.
El segundo artefacto fue utilizado el día 7 de septiembre, aproximadamente a las 23:00 horas en el fraccionamiento Moises Saba, ubicado a un costado de la carretera federal Puebla-Tehuacán.
Los vecinos se percataron que alguien arrojó una especie de granada dentro de una casa y después huyeron. La explosión dejó daños materiales y cimbró el resto de la calle. La explosión solamente dejó daños materiales.
De acuerdo a versiones extraoficiales, al aparecer, la casa que fue atacada pertenece a una mujer que está relacionada con la venta de droga, por lo que se tomó como una especie de advertencia en su contra.
La tercera explosión ocurrió ayer ,9 de septiembre, alrededor de las 20:00 horas. Un artefacto explosivo fue abandonado en el interior del hotel San Carlos, localizado en la junta auxiliar de San Mateo Tlaixpan, perteneciente al municipio de Tecamachalco.
Contrario a lo ocurrido en las dos primeras explosiones, en esta ocasión el artefacto sí dejó como saldo una persona grave además de los daños materiales.
Según los primeros reportes, un vehículo entró al perímetro del hotel y desde ahí se arrojó una caja que instantes después estalló. Tras la explosión se registraron daños materiales al inmueble, rompiendo cristales, desprendiendo puertas y ventanas.
Cuando las llegaron las autoridades, encontraron a una persona lesionada aunque hasta el momento se desconoce si las heridas fueron ocasionadas por los cristales y metal destrozado por la explosión o si el artefacto hirió directamente a esta persona.
A través de las redes sociales, los vecinos de Tecamachalco han expresado su temor, e incluso algunos exigen la renuncia de la presidenta municipal Marisol Cruz García, ya que no ha informado sobre los hechos o una estrategia para abatir a la delincuencia.