Por explotación sexual a por lo menos tres mujeres, siete personas de origen colombiano, fueron detenidas en España por la Policía Nacional y desmantelaron una red de prostitución que operaba en clubes nocturnos situados en las ciudades de Ourense y Burgos.
De acuerdo a la información del portal de noticias Burgosconecta.es, tres mujeres fueron liberadas el miércoles, luego de que se descubriera que mujeres jóvenes, de escasos recursos y oriundas de Colombia, eran prostituidas por una “conocida”.
Como sacada de una serie de Netflix, las jóvenes fueron trasladadas de Colombia España, para laborar supuestamente con su familiar; la líder de la organización que les prometió un futuro mejor, ya que vivían en Centroamérica en condiciones precarias.
La organización presuntamente les proporcionaba a las víctimas todos los medios necesarios para que no tuvieran problemas en la aduana y así contraían una deuda que llegaba hasta los 10 mil euros; deuda que tenían que pagar con “creces”.
El destape
La Policía Nacional de España descubrió lo sucedido, luego de que dos de las víctimas lograran denunciar el engaño que sufrieron al ser llevadas al viejo continente a base de engaños y ser prostituidas, maltratadas y sobajadas por el grupo criminal.
Se descubrió que la líder de la organización era familiar o conocida de las jóvenes que explotaba sexualmente y a quienes financió el viaje en busca de “un mejor futuro”, pagando los vuelos, pasaporte y cuartos de hotel.
Una vez ingresado en España, las víctimas eran trasladadas por la líder hasta clubes ubicados en las ciudades de Burgos y Ourense, donde se les notificaba que habían contraído una deuda de 10 mil euros y debían pagar ejerciendo la prostitución.
Las mujeres declararon a las autoridades españolas que debían trabajar largas jornadas y sin descanso, aunque estuvieran enfermas; al terminar su turno, miembros de la organización les quitaban el dinero que habían ganado, como supuesto abono a la deuda.
En caso de que se negaran a trabajar, los delincuentes las golpeaban hasta poder controlarlas y en algunas ocasiones, la deuda aumentaba porque las víctimas debían de pagar gastos de manutención, alojamiento, ropa e incluso los preservativos para que no quedaran embarazadas, además, les aplicaban multas por mal comportamiento.
El final
Tras una investigación exhaustiva, en la ciudad de Logroño se detuvieron a tres personas; en Burgos, a dos; y en Palencia, la Policía Nacional arrestó a una persona involucrada en el delito.
Se realizaron cateos a tres domicilios de las mencionadas localidades y se aseguraron terminales bancarias, informáticos, teléfonos móviles y documentación relacionada con la explotación de las víctimas.
Como resultado final, tres mujeres fueron liberadas y siete personas fueron detenidas, quienes son investigadas por trata de seres humanos con fines de explotación sexual, favorecimiento a la inmigración ilegal y delitos relativos a la prostitución.
Se reveló que tres de los imputados fueron ingresados a una prisión de España, mientras que la investigación sigue su curso para el resto de los señalados.