La judicialización contra dos elementos de la Policía Municipal, por el delito de homicidio culposo del abuelo de un detenido el jueves 15 de octubre en la colonia Universidades, evidenció que persiste la pugna entre el Gobierno de Puebla y la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Puebla Capital.
Ayer, la Fiscalía General del Estado consignó a los agentes de la policía municipal Pablo y Uriel ante el Poder Judicial, ellos fueron acusados por la muerte de Sergio R., un anciano de 72 años.
Sergio murió de un paro cardiaco mientras intentaba impedir la detención de su nieto Eduardo N., en la colonia Universidades, después de que una mujer embarazada lo señaló por un robo.
El Servicio Médico Forense confirmó en la necropsia del anciano que la causa de muerte fue un paro cardiaco, mientras que el video donde fueron captados los hechos en la calle Universidad Autónoma de Sonora elimina cualquier sospecha en contra de los uniformados, ya que el anciano se desvaneció tras tocarse el pecho. Los uniformados incluso lo auxilian al momento en que sufre el síncope.
Como PÁGINA NEGRA informó, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana se manifestaron la mañana del domingo ante la Fiscalía General de Justicia cuando se confirmó que Dolores Carcaño Sánchez, agente del Ministerio Público, judicializó el procedimiento en contra de los dos uniformados.
Al respecto, Ricardo Salazar Trejo, padre del policía Pablo, informó que la agente del ministerio público le negó acceso a la carpeta de investigación de su hijo, la cual consideró está forzada para fincar responsabilidades contra los dos uniformados.
Fuentes cercanas a las familias de los agentes entregaron videos en donde puede verse al agente del Ministerio Público abandonar las instalaciones del Centro de Coordinación, Control, Cómputo y Comando; incluso se escucha al padre de uno de los uniformados reclamarle que le impidió ver la carpeta de investigación, a pesar de que tiene derecho a conocerla.
Los hechos
El jueves 15 de octubre Sergio R. falleció en la colonia Universidades durante una riña defendiendo a su nieto. Según las primeras versiones, una mujer embarazada acusó a dos jóvenes de robo, entre ellos Eduardo N., nieto de Sergio, quien conducía una motocicleta para escapar por la calle Universidad Autónoma de Sonora, en la capital poblana.
Los dos jóvenes viajaban en una motocicleta e intentaron asaltarla, pero la mujer pudo escapar y denunció los hechos a dos elementos de la Policía Municipal, quienes dieron alcance a ambos presuntos ladrones.
Los muchachos acusados de intento de robo acudieron a un domicilio de la calle Universidad Autónoma de Sonora y sus familiares los defendieron afuera de la casa, por lo que comenzó una riña con dos elementos de la Policía Municipal, cuando Sergio R. sufrió el infarto, según confirmó el Servicio Médico Forense.
Los médicos legistas confirmaron que el cuerpo de Sergio no contaba con ningún tipo de marcas de arrastre, porque en un principio se planteó que había sido atropellado. Tampoco encontraron marcas o golpes.
A pesar de que la necropsia, así como el video de los hechos, deslinda de la muerte del anciano a manos de los uniformados, ambos fueron presentados ante la juez de control Idalia Arciniega para que determine la sanción en su contra.
Ver: Abuelo sufrió infarto durante riña con policías de Puebla, confirma Semefo
Claudia Rivera pidió a Fiscalía y TSJ no ceder a “presiones externas”
A través de un comunicado, el Ayuntamiento de Puebla, encabezado por Claudia Rivera Vivanco, solicitó tanto a la Fiscalía General del Estado (FGE) como al Tribunal Superior de Justicia “hacer valer su autonomía, no permitan presiones externas y se apeguen a derecho” para juzgar a ambos uniformados.
El gobierno de la capital poblana expresó sus condolencias a los familiares Sergio R. y subrayó en el comunicado que los uniformados actuaron “conforme al Protocolo Nacional de Actuación Primer Respondiente” y detuvieron a Eduardo N., el hombre acusado por robo a una mujer embarazada.
En este sentido, la corporación hace un enérgico llamado a la Fiscalía General del Estado (FGE) y al Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), para que hagan valer su autonomía y no permitan presiones externas. Se pide respetuosamente a estas instituciones a que se conduzcan en estricto apego a Derecho, a fin de esclarecer inmediatamente este acontecimiento. Lo anterior, permitirá que se juzgue equitativamente a las personas que infringen la ley y se libere a quienes únicamente cumplían con su trabajo”, señala el comunicado enviado por las autoridades municipales.
Uniformados se manifiestan en solidaridad
En tres distintos momentos del domingo 18 de octubre, los agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Puebla estuvieron presentes tanto en la Fiscalía General del Estado, en la zona de Plaza Dorada, como en la Casa de Justicia del Poder Judicial.
Poco después de las 9:00 de la mañana los uniformados llegaron a la sede de la Fiscalía, cuando se confirmó que la carpeta de investigación contra Pablo y Uriel fue judicializada por los delitos de homicidio culposo, lesiones dolosas y abuso de autoridad.
Policías Municipales acudieron en una segunda manifestación a la Casa de Justicia, al sur de Puebla, después del mediodía. Y en una tercera ocasión se manifestaron ahí mismo haciendo sonar las sirenas de sus patrullas alrededor de las 20:45 horas de la noche.
Hasta el cierre de esta edición se esperaba a que finalizara la audiencia de control de detención en contra de los dos elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Puebla.