Las razones por las que estos 8 municipios poblanos quieren ser Pueblos Mágicos

Ahora que 8 municipios del estado de Puebla se han postulado para ser parte del programa “Pueblos Mágicos”, te mostramos la riqueza natural y cultural que los caracteriza y que, sin duda, querrás conocer en tus próximas vacaciones.

Las comunidades que se han acercado al gobierno estatal para que les ayude a gestionar dicho nombramiento para el año 2021 y se sumen a la lista de los 9 municipios poblanos que ya cuentan con el nombramiento son: Tetela de Ocampo, Tlacotepec de Benito Juárez, Tepeyahualco de Hidalgo, Tecamachalco, Tochimilco, Xochitlán de Vicente Suárez, Izúcar de Matamoros y Zacapoaxtla.

VER: ¡Madre del señor! 8 municipios de Puebla buscan la denominación de Pueblo Mágico

Para ser considerados como parte del programa de “Pueblos Mágicos” que tiene como fin promover y apoyar el turismo local, las localidades deben cumplir con ciertas condiciones geográficas, planes, servicios básicos y de desarrollo, atractivos turísticos y por supuesto mucha magia, para poder ser considerados. 

 A continuación, te presentamos algunas de las bellezas que puedes encontrar en cada una de estas localidades que buscan el nombramiento.

Tetela de Ocampo

Ubicado al norte del estado, el municipio serrano encuentra su nombre en homenaje al político liberal Melchor Ocampo. A mediados del siglo XIX, se le conoció como “Tetela del Oro”, debido a la abundancia de este metal en los cerros de la región. 

Actualmente, es Tres Veces Heroica Tetela de Ocampo y tuvo una importante participación a lo largo de diferentes periodos históricos, como la Guerra de Reforma; la Segunda Intervención Francesa en la que lucharon “Los 3 Juanes de la Sierra Norte de Puebla”: Juan Nepomuceno Méndez, Juan Crisóstomo Bonilla y Juan Francisco Lucas en la Batalla del 5 de mayo. 

Entre los lugares de interés que pueden disfrutarse se encuentran: los Miradores; la Iglesia de la Asunción, las Cascadas de Aconco de 35 y 50 metros de altura; “La Cañada”, un antiguo pueblo minero que data del siglo XVIII; la Casa Museo “Tlapalcalli”; las Grutas Acocomoca, que resguardan un río subterráneo con aguas ricas en minerales descubiertas en 1997; el Cerro de los Frailes, un lugar propicio para practicar escalada y rappel; así como el conocido Mirador de Tetela, con una vista que te robará el aliento. 

Tlacotepec de Benito Juárez

Ubicado entre las ciudades de Tehuacán y Tecamachalco, su nombre significa “en la mitad del cerro” y fue fundado en 1895. 

Los puntos preferidos de los turistas son la Parroquia de Santa Cruz Tlacotepec, construida en 1735 con su propio acueducto; la Zona Arqueológica Teteles de Santo Nombre, edificada entre el 400 y el 1000 D.C.; la Hidroeléctrica de Tepazolco, proyecto elaborado durante la presidencia de Manuel Ávila Camacho; la Reserva de la Biosfera Tehuacán-Cuicatlán, única por su riqueza geológica, biológica y cultural donde aún habitan comunidades indígenas.

El Duraznillo, un semidesierto de la Mixteca que cuenta con un ojo de agua que provee el líquido a las comunidades aledañas, ideal para practicar senderismo mientras admiras la fauna y flora del lugar; el Cerro de la Flor; el Cerro Verde; una cadena de montañas llena de cactáceas, palmas, encinos, orégano, maguey de pulque, mezcalero y el Cerro de las Biznagas, donde se pueden encontrar biznagas de 5 centímetros a 2 metros y medio de altura.

Tepeyahualco de Hidalgo

Este lugar resguarda uno de los tesoros más importantes de Puebla: la zona arqueológica de Cantona, una ciudad prehispánica que fue el hogar de las culturas olmeca, teotihuacana y maya. Fue fundada por el Virrey de la Nueva España, Gastón de Peralta, el 26 de agosto de 1567 y su geografía es propicia para realizar diferentes actividades ecoturísticas. 

Date una vuelta por la Parroquia de San Pedro Apóstol que data del siglo XVI y posee una influencia neoclásica y barroca; la Malpais, una planicie de 35 kilómetros que se extiende por varias comunidades. 

La Hacienda de San Roque, edificada con piedra maciza traída de Cofre de Perote que resalta su bella arquitectura; la hermosa y mística Laguna de Alchichica, una laguna formada sobre un cráter volcánico en la que sobresalen sus corales blancos y el Cerro Volcán de Pizarro, que cuenta con una altura de 2 mil 612 metros sobre el nivel del mar

Tecamachalco

En náhuatl, Tecamachalco se traduce como "En la quijada de piedra", lugar donde se establecieron diferentes comunidades prehispánicas, entre ellos los popolocas, desde el año 1441. 

Desde 1877, la ciudad es conocida como Tecamachalco de Guerrero, donde se encuentra la Parroquia de la Asunción, santa patrona del lugar a quien celebran a lo grande cada 15 de agosto. 

Uno de los sitios más visitados es el Ex-Convento Franciscano del siglo XVI, que además de resaltar por su imponente arquitectura, resguarda una colección de 28 pinturas en forma de medallones que decoran una de sus bóvedas; el Cerro del Águila localizado al norte de la ciudad; la Casa del Conde donde habitó Alonso Valiente, el primer encomendero de Tecamachalco y la Cueva del Rey Cuetzpa, justo en medio de majestuosos cerros.

Tochimilco

Muy cerca de Atlixco y a las faldas del volcán Popocatépetl, se encuentra el municipio de Tochimilco, cuya raíz náhuatl da como resultado el nombre “en la sementera de los conejos”.

Su cercanía con la montaña más importante de México y los frondosos bosques que la rodean, lo convierten en uno de los municipios más lindos y pintorescos de Puebla. Aquí abunda la producción de amaranto, aguacate, durazno, pera, ciruela, entre muchas otras frutas y verduras. 

La ciudad está repleta de calles empedradas y adoquinadas que le dan ese aspecto rústico. Entre toda la belleza del lugar, destaca el convento franciscano de Nuestra Señora Santa María de la Asunción, construida durante el siglo XVI bajo el mando de fray Juan De Alameda, convirtiéndose en una de las joyas arquitectónicas más importantes, dedicada en ese entonces a la fertilidad. 

Xochitlán de Vicente Suárez

Entre las nubes y neblina de la Sierra Nororiental, sobresale el bello Xochitlán de Vicente Suárez, nombre que da como significado “lugar entre flores”, cuya fundación llegó hasta 1885, constituyéndose como Xochitlán de Romero Rubio y posteriormente a su denominación actual, en honor a Vicente Suarez, uno de los Niños Héroes que murió durante la toma del Castillo de Chapultepec el 13 de septiembre de 1847.

El pueblo se encuentra rodeado de montañas y frondosa vegetación, que brinda una mirada del paisaje simplemente espectacular. Entre sus atractivos turísticos se enumeran la Parroquia de San Bartolomé del siglo XVII, el Palacio Municipal y la Casa de Vicente Suarez.

También se puede disfrutar de la tradicional danza de los Quetzalines, el Mirador “Balcón del Diablo” desde donde se observa los enormes cañones de los ríos Zempoala y Ateno, las Grutas de Santa Elena, llenas de pasadizos subterráneos, la gruta de Ocotzoltepétl y la Poza Verde, donde se puede nadar muy a gusto. 

Izúcar de Matamoros

Uno de los municipios más importantes del estado, lleva por nombre “Lugar del camino del pedernal”, aunque algunas personas lo definen como “Lugar de las caras pintadas”. Su población inició con los asentamientos de la cultura olmeca. 

Ante la llegada de los españoles a esta región y su mala pronunciación, denominaron “Izúcar” a la ciudad. Actualmente cuenta con sitios de gran interés como el Palacio Municipal de estilo colonial; el Ex-Convento de Santo Domingo de Guzmán, construido en 1612; la Casa del Portal; el Zócalo de la ciudad que cuenta con una fuente de piedra tallada a mano, los monumentos, estatuas y bustos en honor a Miguel Hidalgo y Costilla, Mariano Matamoros, Benito Juárez, el General Miguel Cástulo y Alatriste y al General Emiliano Zapata.

También puedes visitar el balneario Ojo de Carbón, manantiales, la laguna de Epatlán donde se pesca trucha y mojarra, entre otras actividades recreativas aptas para toda la familia. 

Zacapoaxtla

El “lugar donde se cuenta el zacate” también tiene su lugar en la Sierra Nororiental del estado y recibió el nombramiento de “villa” el 11 de marzo de 1826, años después de la Independencia de México. 

Zacapoaxtla es un lugar lleno de belleza, arquitectónica y natural, entre las que destacan La Parroquia Lateranense ubicada en la Plaza Principal, que recibió el nombramiento de Parroquia en 1798, así como beatificada y adherida a la Basílica de San Juan Letrán en Roma en 1882.

El municipio también presume de Museo Histórico de Sitio "Xolalpancalli", el Mirador y Monumento a la Mujer, el del Fortín, el de Santa Anita, el de Los Asientos, La Cortadura (considerado el más vistoso); La Cascada "La Gloria", con agua del río Apulco, rodeado, enormes árboles; la "Cascada La Olla" con una altura de 35 metros y la "Velo de Novia", donde se cría y vende trucha y el volcán extinto, cuya erupción en el año 1270 sepultó la zona arqueológica de Xaltetela, sitio donde se estableció la cultura maya.