La Auditoría Superior del Estado tiene en la mira a la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, no solo por la venta irregular del equipo de futbol profesional Lobos BUAP, sino por supuestas irregularidades en el ejercicio de 700 millones de pesos entregados por la Federación en 2019.
Además de la creación de un órgano interno de control, la máxima casa de estudios de Puebla tendrá al órgano de fiscalización superior del estado encima por presuntos actos ilegales en el traspaso del equipo licántropo y el manejo de recursos del Gobierno de México, entregados a través de la Secretaría de Finanzas.
El auditor superior del estado, Francisco Romero Serrano señaló que estas son algunas de las posibles cuestiones irregulares que la ASE intentó revisar y que la Tesorería de la universidad se negó a entregar documentación al respecto.
Es desafortunado que existan temas de corrupción ya señalados por el asunto Lobos, así como también algunos traspasos que se llevaron también por parte del gobierno federal a través de la Secretaría de Finanzas por alrededor de 700 millones de pesos, de los cuales se desconoce el destino”.
El titular de la ASE Puebla criticó que la rectoría de la BAUP obstaculizara su labor de fiscalización de recursos durante la práctica de auditoría preventiva, lo que consideró que pone en duda el correcto manejo del dinero en la universidad.
Estos desacatos que lleva a cabo este señor tienen como propósito obstaculizar la labor de fiscalización, así como también ponen entre dicho que tenga una correcta actuación por el hecho del que nada debe nada teme, si el señor rector no tiene nada que ocultar y no tiene nada que temer pues debería de ser más transparente”.
Utilizarían la Auditoría Forense para investigar caso Lobos BUAP
Al detallar como operaría la Auditoría Forense en Puebla, Francisco Romero explicó que esta unidad puede intervenir para investigar la presunta ilegalidad en la venta del equipo Lobos BUAP a Ciudad Juárez.
Apuntó que en este tipo de casos en los que hay cuentas públicas aprobadas y ejercicios fiscales concluidos, la Auditoría Forense puede intervenir para la detección de irregularidades.
Explicó que en este caso hay posibles actos de corrupción debido a que existen indicios de uso de dinero público en el equipo de futbol profesional.
Sobre ejercicios ya concluidos, que inclusive con cuentas públicas ya aprobadas y que tienen una casuística por el hecho de que existen antecedentes de corrupción por el uso de recursos públicos en el ramo de la primera división de futbol profesional se daría el hecho de que se utilizaron recursos públicos para solventar gastos de un equipo que pertenecía al rector y al tesorero de la universidad”.
El auditor superior de Puebla externó que la escuadra de la BUAP no pertenecía a la universidad sino a un grupo de particulares en los que se encontraría el rector de la institución, por lo que se habrían utilizado recursos públicos para solventar gastos de particulares.
Los verdaderos dueños nunca fue la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, los dueños del equipo fueron Mario Mendívil, Óscar Gilbón, el señor (Juan Carlos) Bozikián, el rector Esparza y dos personas más, entonces eran los dueños del equipo Lobos eran particulares, no era la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla”.
Francisco Romero señaló que el rector de la BUAP se defiende mediante la autonomía de la institución y el Consejo Universitario para evitar la revisión de sus cuentas públicas.
Por ese motivo se manifestó a favor de que el gobierno del estado cree un órgano interno de control dentro de la BUAP para que no se evite la entrega de documentos durante la revisión de cuentas públicas en auditorías ordinarias y preventivas.
