Sergio González es dentista en Puebla, el municipio que se pelea junto con Iztapalapa el primer lugar con más contagios del país. No, el no atiende a pacientes con coronavirus, pero por su profesión, el riesgo de contagiarse es alto.
A pesar de todo, mantiene su consultorio abierto con la esperanza de que las medidas más estrictas eviten que el virus llegue a su silla. Obliga el uso de cubrebocas, careta, gel antibacterial, limpieza profunda de superficies, medición de temperatura de sus pacientes, incluso, adecuó el sanitario con una secadora de manos para evitar el uso de toallas de tela.
El dentista relató a CENTRAL que, con la pandemia, muchos de sus clientes cancelaron sus citas dentales por miedo a contagiarse; principalmente personas de la tercera edad. Sin embargo, aún sigue atendiendo a clientes que lo buscan para atenderse infecciones o fracturas de prótesis.
Tengo pacientes que por temor a contagiarse han dejado de venir, principalmente de la tercera edad, ha bajado en algunos aspectos, pero en relación con personas que acuden por infecciones de boca, fracturas de prótesis sí han venido personas porque hay muchas infecciones”.
Al principio, Sergio pensó en cerrar su consultorio temporalmente por el riesgo que representaba para su salud, pero los pacientes lo buscaban para emergencias dentales, por este motivo, decidió permanecer abierto y adoptó medidas estrictas para evitar contagiarse.
“Con el problema de la pandemia, cuando llega el paciente debe poner sus pies en un tapete con sanitizante, se aplica gel antibacterial, se toma la temperatura y se han tomado medidas más estrictas para prevenir, cada instrumento se debe desinfectar forzosamente delante del paciente para que tenga la confianza de que están limpios todos los instrumentos”.
Se disparan gastos en insumos
Uno de los mayores problemas para Sergio es el incremento de los costos de insumos, tras la alta demanda de estos con la pandemia por coronavirus.
Uno de los gastos más fuertes fue la adecuación de su sanitario, pues para evitar el uso de toallas de tela, instaló un secador de manos eléctrico cuyo costo fue de 7 mil pesos.
Además, adquirió también equipo para recibir a sus pacientes como un tapete sanitizante y un termómetro de pistola, que en el mercado se puede adquirir con un costo entre 600 y mil pesos cada uno.
Los cubrebocas subieron 400% su costo en comparación con antes de la pandemia. Expuso que el paquete de mascarillas N95 antes costaba 120 pesos, pero por la alta demanda de estos insumos, ahora su precio ascendió a 600 pesos.
En el caso de los guantes, estos subieron 144% su costo pues antes compraba el paquete en 90 pesos y ahora no bajan de 220 pesos, mientras que el bote de toallas sanitizantes para superficies cuesta 300 pesos y solo rinde para 15 días.
Sergio pide a pacientes conciencia para no llevar a la familia a consulta
Sergio recomendó que solamente acuda una persona por familia, pues al tener a varias personas en la sala de espera, las probabilidades de contagio aumentan.
Señaló que ha sido muy estricto con sus medidas de higiene y es responsabilidad de todos ayudar para que la curva de contagios disminuya, y con ello, salvaguardar la salud de él y de sus pacientes.
Sugiero que la persona no llegue con acompañante a excepción de que esté impedida para caminar o algo así, hay personas que vienen con dos o tres integrantes de la familia, esto no es recomendable. Trato de que no haya personas esperando, porque tengo a mucha gente en la sala de espera y no es correcto”.
Sergio González sigue laborando en un horario de 10:30 a 14:00 horas y de 16:00 a 20:00 horas con previa cita para evitar aglomeraciones y su consultorio se encuentra en la calle 23 sur número 2509 de la colonia Volcanes. El número de contacto es: 22 24 65 40 06.
Este es el mapa interactivo de CENTRAL que muestra los contagios en Puebla por municipio:
