Estamos empezando julio y con este mes arrancan También los procesos de inscripción en las escuelas. La gran pregunta es si vamos o no a regresar a clases. Si se suspenderán el inicio del ciclo escolar, se cancelará por completo para este año o tendremos que someternos otra vez a las tortuosas clases en línea.
Los padres de familia y estudiantes están ávidos por una respuesta, no solamente por la organización de sus tiempos o por saber si tendrán que seguir cuidando a sus hijos en casa sino por la economía.
Se preguntan qué caso tendría que pagar una inscripción si probablemente las clases presenciales no se reanuden. Analizan incluso si no sería más viable perder el año. Además de los casos en los que la pandemia los ha dejado tan lastimados económicamente que no tendrían recursos para que sus hijos regresen a las aulas, al menos mientras se recuperan.
El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta ya ha declarado este 30 de junio la posibilidad de que se aplace una vez más el inicio del ciclo escolar programado para agosto. Dice que si no hay condiciones para el regreso a clases éste no sucederá, No solo por el riesgo de los alumnos a contagiarse, también por la gran cantidad de profesores con comorbilidades.
Puebla se encuentra en semáforo rojo, es decir, en un alto nivel de contagios. De acuerdo con el gobierno federal, el regreso a clases sucederá solo si el semáforo está en verde
Y esto no parece que vaya a suceder pronto.
Barbosa dijo que las predicciones señalan que en unos 15 días Puebla estará reportando 600 contagios de coronavirus diarios en promedio. Actualmente rondamos entre los 300 y 400 al día.
Si como lo hemos visto, la reactivación de la industria automotriz ha traído consigo un incremento exponencial de casos. El regreso apresurado a las aulas podría ser catastrófico.
Según los cálculos matemáticos de un grupo de investigadores de la Universidad de Granada (UGR), meter 20 niños en un aula supone 808 contactos cruzados en solamente dos días.
El artículo publicado por el diario internacional El País explica la cantidad de contactos que puede suponer cada uno de los alumnos. Según estos cálculos, el primer día de clases cada alumno estaría expuesto a 74 personas y la interacción llegaría hasta las 808, la proyección supera los 15 mil contactos en tres días.
Una de las medidas para evitar estos contagios sería el uso de cubrebocas y mascarillas, aunque no en todas las edades es posible y tampoco hay garantía de que sean utilizados correctamente.
Según las proyecciones de los contagios del gobierno federal, del Conacyt, del gobierno del Estado y lo que el propio subsecretario de salud Hugo López-Gatell ha declarado, se espera una pandemia larga que dure como mínimo hasta octubre. Incluso ha llegado decir que podrían ser tres años.
Ustedes creen que los niños irán a la escuela los tres últimos meses del 2020 si es que la pandemia termina, claro con vacunas o con un tratamiento efectivo.
Yo creo que no. Este año no habrá clases presenciales.
