Vaya esta rebatinga
entre los estados,
los que no se alinean
y los resignados.
El semáforo alarmista
pone el mismo rango;
y medidas no realistas
en el pico de contagios.
Reactivar la economía
con máximos cuidados;
predicciones fatalistas
urgen a abrir el mercado.
Ni plata ni inversionistas
el gobierno a inyectarlo;
prioridad capitalista
y sacrificio sanitario.
¿Y el pacto federalista?
Háganse bolas, estados;
de arriba les dictan línea:
la apertura está a su cargo.
“Y yo me voy de gira,
con permiso”, dice AMLO
“ahí arreglan sus medidas
la campaña es mi trabajo”.
Estados no se coordinan
sin interlocutor válido
buscan cualquier salida
para rebelarse al pacto,
y el líder que no concilia
contribuye con el caos.
Por lo pronto las familias
ya se andan paseando;
contradicciones al día
y la curva no se ha aplanado.
¡Ay lector, qué anarquía!
mejor quédese encerrado.