Todos los días vemos
en muina al gobernador
que a punta de decretos
busca frenar el aluvión.
Cierre de comercios
sin prioridad a la nación;
restaurante a domicilio
para evitar concentración.
Para frenar el movimiento
“No circula” sin excepción;
sin condiciones, los alumnos
y la escuela terminó.
Audi, el atrevido
iba a iniciar la producción
y con otro papelito
le robaron la ilusión.
Entre más salen decretos
más rebelde la población:
“es que no llega el pico
y pos ya uno se cansó”.
¿Cuándo pondrá el gobierno
mano dura al peatón
el que anda turisteando
porque en casa se aburrió?
¿Qué hicieron los europeos?
la policía los metió;
si usted no iba al trabajo
directo a casa sin perdón,
nada de andar corriendo
ni asomarse al portón
ni visitas, ni festejos
que la salud colapsó.
El diluvio de decretos
paliativo en caos mayor
el sistema no toque techo
es la real intención.
Se alarga el confinamiento,
mucha gente sin pudor
y que nos cargue al resto
por una mano sin vigor.
Ya no le veo término.
¿Cómo va querido lector?