Un niño de seis años murió en su guardería luego de recibir una fuerte descarga eléctrica tras tocar un cable que salía de un enchufe.
La muerte del niño ocurrió en Frankfurt, Alemania, mientras jugaba en el establecimiento justo antes de que su madre pudiera llevárselo a casa.
De acuerdo con el testimonio de la madre del niño, cuando ella llegó a la guardería su hijo se encontraba corriendo en los vestuarios.
De pronto ella vio que el pequeño salió disparado de la habitación, como consecuencia del shock que recibió al tocar el cable del enchufe que colgaba de la pared.
Aunque la mujer intentó desesperadamente resucitar a su hijo con respiración de boca a boca y compresiones en el pecho, lamentablemente no se pudo hacer nada y él murió en los brazos de su madre.
El cable con el que el menor se electrocutó al parecer estaba ahí debido a recientes trabajos de construcción que se habían realizado en la guardería y que la mantuvieron cerrada por algún tiempo.
Por su parte, Jan Pasternak, del Departamento de Integración y Educación de la ciudad de Frankfurt, informó que no tenía conocimiento de que se hubieran realizado trabajos de construcción en el recinto.
Tras la trágica muerte el fiscal en Frankfurt investiga los cargos de homicidio involuntario contra personas desconocidas, por lo que el foco de la indagación es si alguien actuó en contra de su deber de cuidado.