Dice una frase "Si quieres saber cómo es alguien, mira de qué manera trata a sus inferiores", no sólo aplica para las personas, también a animales.
Aunque en el mundo día a día se lanzan campañas promoviendo el respeto hacia los animales, existen muchísimas personas que los dañan e incluso asesinan sólo por placer.
Tal es el caso que te contaremos hoy, que aunque tiene un par de años, se volvió a viralizar en redes sociales.
Pedro Dinis estaba paseando a su perro en Carrieres-sur-Seine en París cuando vio un extraño bulto en la tierra.
La curiosidad le ganó y al acercarse notó que en realidad era la cabeza de un perro enterrado vivo.
Sin perder el tiempo se apresuró a desenterrar al pobre animal, que lucía sumamente débil y cansado. No se sabe cuánto tiempo estuvo ahí.
Mientras intentaba desenterrar sus patas, su propio perro le hacía entender a la pobre perrita que todo estaría bien.
Al quitar toda la arena se dio cuenta que no sólo la habían enterrado, la habían dejado amarrada de patas.