La política implementada por el gobierno de la República para combatir el robo de combustible y garantizar el abasto, se compone de cinco aspectos, explicó hoy el secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo.
Se trata, de mantener y reforzar la vigilancia en los ductos de todo el país; aumentar el volumen de distribución por vía terrestre (auto-tanques) y ferrocarril (carros-tanque).
En días pasados, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció respecto a estos dos primeros puntos, el despliegue de más de cinco mil efectivos militares y marinos, así como la inversión en 500 pipas de 60 mil litros o mil pipas de 30 mil litros, a fin de garantizar el abasto mientras la seguridad en los ductos sigue endeble.
Alfonso Durazo explicó esta mañana que adicionalmente, se reforzarán los programas sociales en todos los municipios y poblaciones aledañas a los ductos. Al respecto, el presidente López Obrador anunció que dedicará dos días de la próxima semana, el martes y el jueves, a visitar las comunidades próximas a los ductos.
Finalmente, comprometió la judicialización de todos los procesos de investigación hasta desmantelar la red de complicidad por robo de combustible, conforme a los expedientes que integre el Servicio de Administración Tributaria, la Unida de Inteligencia Financiera y la Procuraduría General de la República.