El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) tiene informantes infiltrados dentro de la Caravana Migrante y monitorea los mensajes de texto en los grupos de WhatsApp a través de los cuales se coordina el viaje a Estados Unidos.
Personal del DHS se unió a los grupos para recopilar información que junto a reportes del personal de la dependencia con sede en México, aportan datos sobre el tamaño de la caravana, sus movimientos y las potenciales amenazas a la seguridad.
De acuerdo con un extrabajador del DHS, John Cohen, el monitoreo a ciudadanos no estadounidenses no es una práctica ilegal, aunque cuestiona el origen de los recursos para su financiamiento.
Cohen afirma que la caravana supone un asunto logístico y humanitario, sin embargo dado que buena parte de los miembros de esta aspiran a ingresar de forma legal mediante una petición de asilo, no considera apropiado el uso de tantos recursos de inteligencia para el monitoreo de la caravana.
Encuentro difícil de creer que el máximo riesgo que enfrente esta nación provenga de esta caravana” JOHN COHEN
La vocera del DHS, Katie Waldman, dijo que sería una mala práctica el ignorar a los migrantes que arriban a EU pues el gobierno tiene la obligación de asegurarse sobre la identidad de quienes cruzan sus fronteras para protegerse de las amenazas territoriales.
