El enojo ante el rechazo de levantar los cuerpos de los ejecutados la noche del 2 de julio en Huehuetlán El Grande fue el motivo por el cual uno de los deudos, identificado como Juan “N”, sacó su arma y disparó contra el comandante de la Policía, el regidor de Gobernación y a un agente municipal.
Por la agresión, cayó muerto en el acto el jefe de la corporación, mientras que el funcionario y el uniformado fueron trasladados a un hospital de la ciudad de Puebla.
LA VERSIÓN DEL REGIDOR
En la primera hora del lunes 3 de julio, habitantes de Huehuetlán El Grande informaron vía telefónica a la cabina de la comandancia de la Policía local de la existencia de tres personas sin vida, situación que fue expuesta al regidor de Gobernación, Evelio Salas Salas.
A la par, elementos de la corporación se desplazaban a la cabecera municipal, pero el radiooperador comunicó al funcionario, originario de la comunidad de San Miguel Atlapulco, que los familiares de los fallecidos estaban muy agresivos.
Lo anterior fue informado por el comandante de la Policía Municipal, Martín Loaiza Reyes, al regidor antes de que ambos fueran atacados junto con otro elemento, Enrique “N”, en el Callejón de las Flores, donde estaban los occisos.
En ese lugar apareció Cándido “N”, quien se identificó como tío y primo de las dos víctimas. Pidió a los municipales y al regidor que apresuraran el levantamiento; sin embargo, la respuesta del fue que la tarea le competía a la Policía Ministerial.
Aproximadamente a las 8.00 horas, Juan “N” se acercó al comandante de la para exigirle que se efectuara el levantamiento, pero la respuesta fue la misma.
Tras esto, el sujeto sacó un arma de fuego y le disparó a Loaiza Reyes, quien cayó al suelo; después la accionó contra el agente Enrique Salas Villa, y, posteriormente, contra el regidor de Gobernación. Estos últimos fueron llevados al Hospital General “Rafael Moreno Valle”, en la ciudad de Puebla.
POLICÍA HERIDO ESTABA FRANCO
Para Enrique Salas Villa, la historia es diferente. Se encontraba en su domicilio cuando, a las 2:00 horas, recibió la llamada de la comandancia para que, con urgencia, se presentara; sin embargo, a las 9:00 horas, le dijo a su esposa que lo alcanzara en el hospital mencionado debido a que había sido herido por ataque de bala.
Hace seis meses ingresó a la corporación. El 3 de julio estaba descansando, pero fue solicitado para reforzar las tareas de auxilio para, a la postre, ser víctima del ahora prófugo.
Trascendió que Salas Villa y Salas Salas ya fueron dados de alta, pero, por su seguridad, no se reveló la fecha; en tanto, ayer domingo, el Ejército Mexicano, apoyado por elementos de la Policía Estatal Preventiva, efectuó un operativo de reconocimiento en la zona de Huehuetlán el Grande para localizar a los posibles integrantes de la banda “Los Cuijes”.
Luego de las ejecuciones, el alcalde Lázaro Luna Corona informó que seis de los siete policías municipales renunciaron al cargo, por lo que tuvieron que contratar a otros seis en el transcurso de la semana, tres por cada turno.