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Lastiri sí unió a todos los priistas… pero en su contra

Por Viridiana Lozano / /

Guiapara interior viri

El dirigente estatal del PRI, Jorge Estefan Chidiac; las senadoras Blanca Alcalá y Lucero Saldaña; todos los diputados federales, locales, alcaldes recibieron la llamada.

Los más importantes recibieron la llamada directamente del subsecretario de la Sedatu, Juan Carlos Lastiri, otros desde las oficinas de la dependencia.

Bueno ¡hasta yo recibí la llamada tres veces para confirmar que iría al evento!

Pero bueno, ni yo ni la pipitilla éramos importantes para el subsecretario. Aquel 18 de junio, Lastiri quería tener a la plana mayor del PRI en su evento multitudinario para que la lectura fuera la cargada tricolor al candidato a la gubernatura.

Me contaron varios de ellos que el subsecretario les juró y perjuro que el evento no era su destape, que era para todos.

“Si el evento lo convocas tú, lo presides tú y solo tú hablas, es solo tú evento”, le dijeron todos.

El final de esa historia ya lo sabemos, ningún priista connotado se paró por el Centro de Convenciones aquella tarde.

Pero al final el priista de los spots de corredor, logró su cometido.

Los militantes más destacados del PRI se unieron… pero en su contra.

Así cada uno de ellos empezó a hablar mal de él en público y en privado.

Javier López Zavala salió a decir que vigilarían que no ocupara recursos de la Sedatu para su disque recolección de firmas.

Una semana después, justo ayer, el dirigente del PRI, Jorge Estefan salió a decir lo mismo: ni la Sedatu ni los comités municipales ni los alcaldes a quienes, de buena fuente sé, los obligó a llevar de a 100 acarreados a su evento bajo amenaza de retirarles los apoyos de la dependencia.

Les decía, Estefan, Zavala, Aclalá, Giorgana, Lucero Saldaña, Pablo Fernández del Campo, Ricardo Urzua, todos están ya unidos en su contra.

La primera reunión involuntaria sucedió este fin de semana, congregados en una fiesta familiar del exdiputado federal, José Luis Márquez.

No repararon en unir las mesas y ponerse a platicar sobre el partido.

En esa mesa casi todos quieren ser “el candidato a la gubernatura”, en eso no creo que aún se hayan puesto de acuerdo.

Nota al pie: Prometo NO escribir más de Lastiri al menos en un mes, porque ya parezco disco rayado, pero es que no deja de dar de qué hablar.

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