El titular de la parroquia del Divino Salvador, barrio de Xoloco, de esta ciudad desmintió que la sustancia que emana de un árbol en el que se labra la imagen de un Cristo sea sangre.
Fue durante el fin de semana, que algunos feligreses se percataron de que en la parte de la cabeza, donde fue colocada una corona de espinas, comenzó a brotar un líquido de color rojo, el que suponían era sangre.
Por tal motivo, el párroco Miguel Navarro Espinoza, dio a conocer el arribo de un profesionista químico, que descartó la versión de los creyentes y quien además determinó se trata de un líquido propio del árbol.
Este Cristo es elaborado en el acceso al cerro de Texaxaca, lugar en el que se ubica el templo expiatorio de la virgen de Guadalupe y donde en los últimos meses, se han realizado obras de mejora del camino.