Yahir Esquivel, ahijado del párroco de Coyuaco Erasto Pliego asesinado el 13 de noviembre pasado, fue quien presuntamente planeó y asesinó al vicario con la ayuda de Rogelio Reyes, según informó la Procuraduría General de Justicia del Estado.
La PGJ informó este fin de semana la consignación de ambos hombres por el delito de homicidio calificado. Sin embargo mantiene abierta la averiguación previa ya que es probable que en el homicidio del sacerdote existan más personas involucradas.
De acuerdo a la investigación, Yahir debía al párroco al menos 50 mil pesos y fue cuando el vicario le exigió el pago, que el joven planeo su homicidio a fin de liberarse de la deuda.
En 2008 el párroco Erasto Pliego proveniente de Axochiapan, Morelos, llegó a la localidad de San Juan Raboso, junta auxiliar de Izúcar de Matamoros, donde brindó sus servicios por aproximadamente tres años, según reveló este día Diario Cambio.
Ahí conoció a un matrimonio de profesores, padres de Yahir originarios de la localidad de Matzaco, también enIzúcar de Matamoros. En 2011, la víctima fue reubicada por el arzobispo Víctor Sánchez Espinoza en Cuyoaco, pero Yahir y sus padres lo seguían frecuentando y en algún momento el joven de 26 años de edad le pidió prestado 50 mil pesos.
Según informó la PGJ, el 12 de noviembre pasado, Yahir y Rogelio llegaron a bordo de un automóvil Chevy color guinda y placas TYH-4385 del estado de Puebla al curato de la iglesia de Cuyoaco, donde estuvieron conviviendo por varias horas con el padre Pliego de Jesús.
De acuerdo a las indagatorias, la reunión fue planeada para ubicar el pagaré que el joven había firmado al párroco, robarlo y deshacerse del sacerdote.
Asi fue que durante la madrugada del 13 ambos muchachos golpearon al padre y luego lo obligaron a abordar su camioneta Chevrolet Trax, robaron más de 60 mil pesos en efectivo, además de otros aparatos electrónicos y documentos como diversos pagarés.
La relación de hechos informada por la PGJ señala que se trasladaron hasta el paraje “El Silbato” en Nopalucan, en donde decidieron matarlo y quemar sus restos. Después ambos jóvenes huyeron a Atlixco y abandonaron ahí la camioneta.
Los hechos se encuentran asentados en la averiguación previa 2948/2015/Tepeaca, la cual sigue abierta mientras continúan las indagatorias pertinentes para determinar si hay más personas implicadas.