Tras serle concedido el arraigo domiciliario a la activista Enedina Rosas Vélez, presa por su oposición al gasoducto Morelos, su hija Lucinda Quintero Rosas detalló que su madre se encuentra feliz por volver a su casa después de mantenerse por casi 5 meses en condiciones deplorables en el Centro de Readaptación Social de Atlixco.

En rueda de prensa Lucinda Quintero dio a conocer que ayer por la noche le notificaron que su madre era conducida hacia su domicilio pues el juzgado penal de Atlixco había concedido el arraigo domiciliario por su delicada situación de salud.

A Enedina Rosas le fue diagnosticada  Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) por lo que fue enviada del penal de Atlixco a una clínica local desde hace dos semanas.

Mario Vélez, de la Unión Campesina Democrática, aseguró que el arraigo domiciliario de Enedina Rosas es un logro de las organizaciones civiles y los movimientos contra el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.

Es producto de la lucha legal y la protesta social y no es una muestra de la civilidad politica del gobernador", comentó Mario Vélez.