La muerte cerebral del niño José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo, herido por agentes de la Policía Estatal con un proyectil de punta de goma el pasado miércoles 9 de julio, fue confirmada hoy por el Doctor José Antonio Martínez García, director general del Hospital General del Sur.

En rueda de prensa, el Dr. Martínez García indicó que luego de realizar hoy las pruebas pertinentes, se confirmó el diagnóstico de que el menor de 13 años presenta ya muerte encefálica o cerebral.

Los familiares de José Luis, encabezados por su tía Narcisa Tamayo Montes, se encuentran a las afueras del Hospital General del Sur donde hoy por la mañana se les reveló el estado de salud cuyo pronóstico indica que José Luis no volverá a respirar sin aparatos y máquinas.

Una cuadrilla de mujeres de Chalchihuapan acompaña a los familiares de José Luis y su madre, Elia Tamayo Montes, se encuentran en la junta auxiliar por temor a más represalias en su contra de parte del gobierno del estado.

CENTRAL entrevistó a la tía del menor quién señaló que por el momento no darán más comentarios a medios de comunicación por respeto a la madre del niño. Con biblias y rosarios en mano, Narcisa y las mujeres de Chalchihuapan se mantendrán haciendo guarda a la espera de la noticias que les den los médicos del nosocomio Sur.

José Luis Tehuatlie fue hospitalizado desde la tarde del miércoles 9 de julio luego de ser una víctima de la refriega de agentes estatales que le dispararon a la cabeza con un proyectil de punta de goma cuando cruzaba el puente de San Bernardino Chalchihuapan al momento de la violenta disolución de la manifestación que llevaban a cabo los vecinos de la junta auxiliar por el retiro de los registros civiles de parte del gobierno de Rafael Moreno Valle.

¿Cómo se dictamina una muerte cerebral?

De acuerdo a medios consultados por CENTRAL la muerte cerebral se dictamina a una persona cuando la sangre y el oxígeno dejan de fluir al cerebro, por lo que este deja de funcionar totalmente.

Debido a esto, los médicos colocan un ventilador para que pueda respirar por la persona, a fin de que órganos como el corazón y el hígado continúen recibiendo oxígeno y puedan funcionar durante algunos días después de que el cerebro muere.

Por lo tanto, este tipo de muerte se declara si el paciente es incapaz de respirar sin asistencia médica, carece de respuesta pupilar a la luz y de respuesta al dolor, y se interrumpe el flujo de sangre al cerebro. Una vez que se declara muerte cerebral, no hay posibilidad de recuperación.

La hora de defunción legal u oficial corresponde al momento cuando se documenta el diagnóstico final de la muerte cerebral en el expediente del hospital.

Aproximadamente el 91% de los traumatismos cerebrales relacionados con el uso de armas en Estados Unidos son fatales, mientras que solo un 11% de los traumatismos cerebrales causados por caídas terminan en la muerte, según el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares de EU.