A más de ocho meses de la pomposa inauguración de la primera etapa, el Centro Integral de Servicios de Puebla, construido por los empresarios favoritos del morenovallismo los hermanos Abed Roaunnet y que tendrá un costo total de 3 mil 800 millones de pesos pagaderos a 24 años, la mega obra del sexenio morenovallista está incompleta, pues a estas alturas, aún tiene áreas en obra negra.
El Centro Integral de Servicios, inaugurado el 15 de enero con el Segundo Informe de Gobierno de Moreno Valle, aún está incompleto, pues los constructores favoritos del sexenio no han podido terminar la obra desde hace 10 meses y el palacete de talavera no cuenta con ningún elevador del estacionamiento subterraneo a la superficie funcionando.
En julio de 2012, el gobierno de Rafael Moreno Valle hizo modificaciones al Proyecto de Prestación de Servicios (PPS) del CIS para incluir como constructor de refuerzo a los hermanos Abed con su empresa Alfa Proveedores y Contratistas de Puebla (Apycsa) y desde entonces, los elevadores y los estacionamientos tenían un intenso retraso con respecto al resto de la obra.
Es preciso recordar que la obra emblemática del sexenio se construye con PPS y que el gobierno del estado está obligado a pagar los próximos 24 años una iguala anual de 161 millones de pesos, según se desprende del decreto aprobado por el Congreso del Estado.
En un recorrido que realizó CENTRAL por la mega obra del morenovallismo se pudo constatar que los ascensores del estacionamiento subterraneo cuentan solamente con letreros que indican los servicios que ofrecen los tres edificios del CIS sin embargo, no están listos para su uso.
En breve entrevista con un guardia de seguridad, declaró que se planeaba que los elevadores estuvieran para el mes de enero, pero sin razón alguna los trabajadores no concluyeron la obra y así los han dejado, en obra negra hasta el momento.
De acuerdo a la entrevista con el empleado de seguridad, los últimos ajustes a la obra posterior a su inauguración fue detallar los jardines y las partes exteriores de los edificios.
Los servicios que ofrece el CIS son 130, entre los que destacan, finanzas, impuestos control vehicular, altas y bajas de placas de automóviles, registro catastral, estimaciones de obras, hasta pagos de cuentas de Soapap y ha funcionado sin contratiempos hasta el momento.
El inmueble cuenta con una superficie total de 68 mil 620.46 metros cuadrados con tres edificios arquitectura contemporánea, una plaza de acceso (zócalo y/o plaza cívica) de 12 mil 410.29 metros cuadrados; un edificio ejecutivo de 9 mil 511.50 metros cuadrados; un edificio norte de 14 mil 499.91 metros cuadrados y un edificio sur de 14 mil 68.30 metros cuadrados.
Además de contar con un estacionamiento subterráneo con 975 cajones; vialidades de 16 mil 11.35 metros cuadrados; lago de 8 mil 196.90 metros cuadrados y áreas verdes de 78 mil 285.55 metros cuadrados con horarios de atención de 9 a 3 de la tarde de lunes a viernes y sábados de 9 a 2 de la tarde.
Julián Abed, constructor
Hasta el momento, Julián Abed Rouanett es el único constructor poblano que ha competido con las empresas foráneas Ingenieros Civiles Asociados (ICA), Codesa y Acciona Infraestructura, las encargadas de las obras emblemáticas del morenovallismo inauguradas el pasado 5 de Mayo, como los dos distribuidores viales de Zaragoza.
La familia Abed a través de su empresa Alfa Proveedores y Contratistas fue la única constructora poblana en lograr una mega obra en los principios del morenovallismo, al obtener el contrato por 493 millones 732 mil pesos para la construcción del distribuidor vial autopista México-Puebla con calzada Zaragoza, ubicado en la zona conocida como “El monumento del taco”, de acuerdo a la licitación SA–OP–LPE–2011–034.