La opción David Luiz para reforzar el eje defensivo del Barça está ganado enteros. El decidido paso adelante que ha dado el central brasileño en estas últimas horas ha resultado fundamental para acelerar los contactos que ya se mantenían desde el Camp Nou. Fuentes del entorno del jugador del Chelsea conocedoras de la operación han revelado a MD que para facilitar su llegada al Camp Nou estaría dispuesto a recortarse el sueldo. No entra en los planes de José Mourinho y no está dispuesto a dejar escapar esta oportunidad o a acabar en un club de un nivel muy inferior. David Luiz ya se ha encargado de hacer llegar el mensaje a la directiva azulgrana a través de los mismos conductos que en la Copa Confederaciones le alertaron de que estaba en la lista
El pasado 30 de julio, Tata Martino comunicó al Barça su orden de preferencias. Con Thiago Silva descartado por su renovación con el PSG, el técnico argentino se decantó por dos nombres: David Luiz y Daniel Agger. ambos en la Premier League. El primero partía con cierta ventaja sobre el segundo. Los mecanismos azulgrana se pusieron de inmediato en funcionamiento. Aunque ya se habían establecido un acuerdo con ellos, las negociaciones con los clubs se han desarrollado de forma paralela en estas últimas horas, como explicó este diario hace dos días. El vicepresidente Josep Maria Bartomeu y el director de fútbol Raül Sanllehí se han encargado de todas las gestiones.
Las primeras negociaciones dejaron claro que la operación más viable era Agger. Porque el Liverpool estaba dispuesto a sentarse en la mesa, por la predisposición del jugador y porque el precio no era desorbitado. El caso David Luiz se resistía. Esencialmente, porque el Chelsea elevaba su caché a los 46 millones de euros. Una cantidad que el Barça no se planteaba ni por asomo.
Pero cuando las conversaciones con el danés habían entrado en una atmósfera favorable, la iniciativa de David Luiz a facilitar su llegada al vestuario de Neymar ha reactivado el ánimo azulgrana. El jugador dará un empujón a los contactos rebajándose el dinero de su sueldo. El mismo gesto que hizo Mascherano y que en cuestión de días le vistieron de azulgrana. Thiago Silva no lo entendió así.
En las oficinas del club saben que no será tan sencillo. Mou no le abrirá la puerta así como así y mucho menos al Barça, el club que le ha puesto más palos a su carrera profesional. No, no será una empresa sencilla y aún así la ofensiva será total e inminente. El propio Tata Martino rogó al club que las gestiones se aceleraran porque quería contar con el central para la Supercopa de España de mediados de mes.
Si es a un precio razonable, el dinero no será un escollo. El vicepresidente económico Javier Faus así lo dijo ayer en el viaje a Israel. "El dinero no será un problema a la hora de incorporar a un jugador. El departamento económico lo que hará es conseguir el dinero necesario para pagar el traspaso una vez haya un acuerdo con algún club", recordó.