Feminicidios

Karina Reyes, la niña víctima de feminicidio olvidada durante años por las Fiscalías de Puebla y Oaxaca

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Además de prohibir cualquier contacto con la prensa a su madre, Elsa Crecencio, ambas dependencias se han olvidado del tema y hasta el momento no existen nuevas diligencias para dar con Mariano Hugo Garay, el presunto feminicida que se encuentra libre para cometer otro crimen.

Por Edmundo Velázquez / @mundovelazquez

/ Puela, Pue

A dos años del feminicidio de la niña Karina Reyes Crescencio, de 13 años, las fiscalías de Puebla y Oaxaca no han podido avanzar en el esclarecimiento del crimen y la detención de su presunto feminicida, el trailero Mariano Hugo Garay.

El 6 de abril de 2016 el cuerpo de la pequeña fue encontrado en la autopista México-Tuxpan, a la altura del municipio poblano de Santa Rita Tlahuapan. Las autoridades estatales acusaron que se trataba de una sexoservidora, nunca hicieron un esfuerzo por buscar a su familia y fue enterrada en una fosa común, sólo tres días después, el 9 de abril.

Fue hasta que la periodista y activista Verónica Villalvazo —mejor conocida por su blog Frida Guerrera, en el que ha acompañado a familiares de víctimas de feminicidio de todo el país— dio seguimiento al caso que pudo conectar que la niña encontrada en Puebla coincidía con el caso de una menor desaparecida en Oaxaca, el 5 de abril.

El seguimiento de la periodista logró la exhumación del cadáver, lo que corroboró que se trataba de Karina Reyes, hija de Elsa Crescencio, una mujer que no habla español y que es originaria de Zacatepec Mixe, en el estado de Oaxaca.

Fue hasta el 9 de noviembre de 2016 que la pequeña fue entregada a su familia para ser sepultada en su comunidad.

Las fiscalías de Puebla y Oaxaca se mantienen sin avances o registros de cuál podría ser la ubicación del presunto feminicida y no han entregado ni un solo avance del caso a la madre de Karina, según reportaron.

Discriminada desde el hallazgo de su cadáver

El cuerpo Karina Reyes Crescencio, de 13 años, fue encontrado al mediodía del miércoles 6 de abril del 2016 por los paramédicos de Caminos y Puentes Federales (Capufe), a la altura del kilómetro 66+500 de la autopista México-Puebla.

Uniformados municipales, policías federales y agentes ministeriales asignados a la regional de San Martín Texmelucan acordonaron la zona. El primer reporte indicó que el cuerpo presentaba ya estado de putrefacción; portaba blusa negra sin mangas y con encaje rojo en el cuello, brasier morado, pantalón de mezclilla color gris, calzón azul rey y sandalias rosas.

En el lugar donde se encontró el cadáver había papel higiénico y condones usados, por lo que las versiones policiacas advirtieron de inicio que se trató de una sexoservidora.

La periodista independiente Verónica Villalvazo ―o “Frida Guerrera”― publicó en su blog desde el 13 de julio la historia de Karina Reyes. Localizó a la madre de Karina, la señora Elsa Crescencio de 35 años, quien es originaria de Candelaria Mixe, en Oaxaca, y que apenas habla español.

VER: Se llevaron a Karina y la mataron

A través de una intérprete, la señora Elsa relató a la periodista que desde el 5 de abril su hija salió de la casa y dijo que iría con sus amigas. Karina trabajaba en un restaurante en Oaxaca que atendía a varios traileros que llevaban maíz a una bodega cercana.

Ese día se dirigió su trabajo, según testigos, subió a un tráiler con Mariano Hugo Garay, un hombre de 31 años que conoció semanas antes y con quien le advirtieron que no saliera, porque era una persona peligrosa. Un día después su cadáver fue encontrado en la autopista México-Puebla.

Fiscalía de Puebla ocultó que en verdad se trataba de una niña

La Fiscalía General del Estado jamás reveló que en realidad se trataba de una niña. Además de que el cadáver fue enviado rápidamente a la fosa común, la señora Elsa Crescencio no pudo reportar la desaparición de su hija hasta el 28 de abril, por no hablar castellano tardó en presentar la denuncia por desaparición y hasta finales de junio, cuando fue llamada por la Fiscalía de Oaxaca para informarle que su hija estaba muerta.

Elsa reconoció el cuerpo de Karina por las fotos que le mostraron las autoridades, quienes le informaron que la niña fue abusada sexualmente, estrangulada y arrojada a una carretera de Puebla.

La autora del blog Frida Guerrera buscó a CENTRAL, para cotejar la información publicada en el Mapa de Feminicidios de este medio comunicación, en donde los datos de Karina coincidían con el Feminicidio 25 del 2016.

De vuelta a casa

El Ayuntamiento de Santa Rita Tlahuapán confirmó que el cuerpo de Karina fue exhumado la mañana del 9 de noviembre, pero no dio más información sobre el caso.

Así fue que, siete meses después, el cadáver de la niña de 13 años regresó al municipio de Zacatepec Mixe, en el estado de Oaxaca, específicamente a La Candelaria Mixe en donde la Fiscalía de ese estado le ordeno a su madre sepultarla inmediatamente, por lo que no se pudo estudiar a fondo el cuerpo y así localizar pruebas nuevas.

Mientras tanto, en Oaxaca, la Fiscalía mantuvo total sigilo, le pidió a su madre estar con ellos en todo momento y acompañarlos al traslado del cuerpo y le prohibieron hablar con la prensa.

Ver: Siete meses después entregan los restos de la niña Karina Reyes a su madre en Oaxaca

Hasta la fecha, a dos años del brutal feminicidio, tanto la Fiscalía General del Estado de Puebla como su homóloga en Oaxaca no han dado ni un solo avance a la familia de Karina.

Por el contrario, ambas dependencias se han olvidado del tema y hasta el momento no existen nuevas diligencias ni actuaciones para dar con el presunto responsable, quien se encuentra plenamente identificado y libre para cometer otro crimen.

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