La audiencia donde se resolvería la situación legal de Petronilo N., el único instigador detenido hasta el momento por el linchamiento en Acatlán de Osario, se desarrolló en audiencia privada, pues ante la presencia de los medios de comunicación, se dijo que se podían “victimizar a terceros”.
La solicitud fue realizada por Víctor Alonso Tadeo Solano, asesor legal de familiares de las víctimas y ni los tres representantes de la Fiscalía General del Estado (FGE), ni los tres abogados particulares de Petronilo N., pusieron objeción por lo que la Jueza de Control decidió retirar a todos de la sala de audiencias de la Casa de Justicia Puebla.
En la audiencia solo se quedaron las partes intervinientes, Guadalupe Flores, María del Rosario Rodríguez y Jazmín Sánchez, papá, mamá y esposa de las víctimas; los familiares de Petronilo N., quienes se encontraban presentes en el lugar, también tuvieron que abandonar la sala.
De momento, se está a la espera de que las autoridades indiquen si Petronilo N., fue vinculado a proceso o no, pues en la audiencia inicial, su detención fu calificada como legal y se le imputaron los delitos de homicidio calificado, daño en propiedad ajena doloso y lesiones dolosas contra funcionarios públicos por lo que se le impuso prisión preventiva y se ordenó su traslado al penal de San Miguel.
Es importante recordar que la Fiscalía General del Estado (FGE), tiene identificados a 29 participantes activos y directos en el linchamiento, esto gracias a los videos que fueron grabados por los mismos pobladores.
La dependencia a cargo de Víctor Carrancá Bourget giró varias órdenes de aprehensión y dio cumplimiento a dos de ellas, con las cuales se pudo detener a Petronilo N. y Manuel N; sin embargo, este segundo murió después de ser detenido. Según las autoridades, su estado de salud era grave, pues padecía cirrosis hepática.
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El linchamiento ocurrió el pasado 29 de agosto, cuando Alberto Flores, de 43 años, y su sobrino, Ricardo Flores, de 22, salieron de su domicilio a bordo de una camioneta para comprar material.
Los dos hombres fueron acusados de intentar robarse a dos niños en una comunidad del municipio de Acatlán de Osorio y fueron quemados vivos.
