Este viernes 25 de agosto, familiares de Paulina Camargo Limón arribaron a las oficinas del Poder Judicial de la Federación portando pancartas en las que piden a los juzgados federales y magistrados que hagan justicia por la desaparición de la joven hace dos años.
Vestidos con playeras verdes, la familia de Paulina Camargo expresó su molestia e indignación por los constantes giros de tuerca que ha sufrido el caso, donde hasta el momento no se ha podido dictaminar qué sucedió con la joven.
Este 25 de agosto se cumplen dos años desde que la joven, quien tenía cuatro meses y medio de embarazo, salió de su casa a ver a José María Sosa —el padre de su hijo— para que la acompañara a hacerse unos exámenes en la Plaza del Sol de San Manuel y nunca regresó.
La última imagen que hay de ella es la que captó una cámara de seguridad a una calle de la plaza, y se les ve a ambos subir a un taxi. El resto de la historia fue armada por la Fiscalía con base en sus investigaciones y se resume a que llegaron a la casa del joven en La Margarita, discutieron y Sosa le aplicó una llave hasta matarla, metió su cuerpo en una bolsa de basura y lo arrojó a un contenedor, el camión se la llevó y fue arrojada entre toneladas de desechos en el Relleno Sanitario.