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Martes, 03 Marzo 2015 15:19

Sepultan a Toñito en Atencingo; despiden al niño que falleció víctima de bullying

Tras año y medio de agonía, ayer murió el niño de 14 años, Antonio de Jesús López Monje, víctima de bullying en la Secundaria Galileo Galilei de Amozoc. Este día fue sepultado en la comunidad de Atencingo, Puebla lugar de donde era originario

Por : Edmundo Velázquez / @mundovelazquez , Atencingo, Puebla

El niño Antonio de Jesús López Monje fue sepultado esta mañana en Atencingo, Puebla, lugar al que se mudó junto con su madre para pasar sus últimos días al lado de sus abuelos luego de las graves heridas por bullying que lo dejaron inválido.

Unos meses atrás su familia sabía que no mejoraría y su madre María de Jesús Monje Tapia decidió cambiar de residencia a esta zona cañera del estado de Puebla, a unos minutos de Izúcar de Matamoros.

El plan de la madre de Toñito era aprovechar una oportunidad para moverlo al mar y cumplir su último deseo que era conocer la playa, sin embargo fue impedida por los médicos debido a las complicaciones de salud que presentaba el menor.

El estado de salud del niño fue bastante crítico pues tuvo que soportar 9 operaciones a manos de especialistas del Distrito Federal, luego de que sufriera una inflamación en el cerebro a causa de la golpiza que le dieron sus compañeros de la Escuela Secundaria Galileo Galilei en Amozoc.

Según palabras de Roberto Castro Barranco, padre del adolescente, al diario Excélsior,  el niño estaba sano hasta ese 28 de octubre del 2013.

Él estaba sano, ¿sí me entiende? Entonces, eso resultó de los golpes que le dieron en la escuela unos compañeros suyos allá en Puebla, allá en la escuela Galileo Galileí. Estuvo en tratamiento allá en la ciudad de México casi un año, más de un año; entonces, ya no tenía cura y nos lo trajimos para aquí, para su casa", relató el padre del menor en una entrevista telefónica con el diario nacional.

La golpiza no fue reportada por Toñito inmediatamente, fue hasta noviembre que comenzó a sentirse mal y se le diagnosticó un traumatismo craneoencefálico. A mediados de 2014, los médicos informaron que tenía muerte cerebral parcial y había perdido 60 por ciento de la vista, debido a los golpes en la cabeza tampoco tenía control de esfínteres y no podía realizar movimientos básicos de manos y piernas, además de que perdió capacidad lingüística.

Fue la madrugada del lunes que finalmente Antonio falleció en Atencingo, dónde fue sepultado este martes.

Se espera que, tanto la Procuraduría General de Justicia, como Secretaría de Educación Pública en Puebla, confirmen los avances del procedimiento iniciado el 28 de octubre del 2013 para ubicar a los responsables del homicidio que, según se sabe, eran compañeros del muchacho  en tercero de secundaria.

En la escuela "Galileo Galilei" se han abstenido a dar declaraciones sobre el tema y aseguran que la SEP emitirá un reporte oficial.

Fotos: La Zafra Noticias